María Barros, colección de ensueño

María Barros y Martin Lamothe
Foto: EUROPA PRESS 

MADRID, 15 Feb. (CHANCE) -

   Maria Barros da comienzo a la segunda jornada de la pasarela Mercedes Benz Fashion Week Madrid con un desfile cargado de fantasía. El mundo de los sueños queda presenta en los diseños plasmados en color inspirados en el lenguaje cinematográfico del surrealismo. Una colección donde la expresión del inconsciente conforma el universo onírico de la diseñadora.

   Vestidos en tonos suaves, rosas palo, camel y naranjas, en contrapunto con los azules eléctrico marcados con brillo y el verde botella. Destacan los cortes por debajo de la rodilla. Los midi se combinan con los largos que terminan en largas colas.

   Pantalones bombachos combinados con jerseys de lana gordos y cuellos recargados con lazos tanto en vestidos como jerseys marcan el punto de inflexión. Lazos tambien en la cintura de vestidos y abrigos, también en largo y tono camel.

   Una segunda parte marcada con vestidos largos, de ensueño en seda. Volúmenes asimétricos y depurados. Vaporosos y siguiendo la tonalidad anterior: en verde botella y azul klein. Terminados en cola y con espalda al aire también en tonos tierra.

   En definitiva, una colección de ensueño, de colores intensos y puros, que nos transporta a un mundo de capricho y deseo, al mundo onírico propio de Buñuel, Dulac o Cocteau.

MARTIN LAMOTHE Y SU MUJER MONACAL

   Martin Lamothe es la siguiente en presentar su colección CHANCE. Tal y como indica su nombre, la fortuna y el destino se dan cita a lo largo de los diseños presentados, inspirados en el mundo del azar.

   Su diseñadora nos presenta una colección inspirada en la mujer y en su fortaleza. Nos recuerda a una mujer de los años 70, que sale de la psicodelia y descubre el mundo, lo desconocido.

   Tres grandes bloques de color muy marcados que se divide entre el drama y la sobriedad absoluta. Un primer aire monacal, inspirado en las brujas, en las adivinas, las curanderas, que van desde su intimidad más oscura hasta su aura más luminosa.

   Tejidos de microfibra engomada que nos recuerdan al cuero. Colores oscuros, íntimos, que poco a poco van dando paso a una mujer más medieval, más guerrera. Se abren paso serrajes en tonos rojos y abrigos de corte recto.

   La última parte representa la feminidad absoluta. La sobriedad se pierde y deja paso al color. Un punto de luz con estampados 'fortune' de monedas con aire New Age. Diseños en seda enguatada y detalles en piel que nos transportan al mundo helénico, con toques futuristas.

   En cuanto a los complementos, vemos sombreros maxi y austeros al principio, botas infinitas después, que simulan pantalones en los vestidos más cortos. Zapatos de salón marcados, con aire monacal, hechos especialmente para la colección CHANCE por Pilar Burgos.

Leer más acerca de: