Corinna, el Rey Juan Carlos y los 65 millones más envenenados de la historia

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Publicado: lunes, 16 marzo 2020 21:57

   MADRID, 16 Mar. (CHANCE) -

El Comunicado del Rey Felipe VI ha supuesto otro antes y otro después dentro del seno de la Casa Real. Primero fue la abdicación del Rey Juan Carlos, luego con la Proclamación de Felipe VI vino la reducción de lo que eran los miembros de la Familia Real limitándose a los monarcas Felipe, Letizia, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, y ahora la renuncia a la herencia del Rey Juan Carlos por parte de su hijo Felipe y la Princesa Sofía, todo precipitado por la aparición de informaciones que no dejaban nada bien al monarca anterior.

Casi 40 años de reinado tirados por un safari. Lo cierto es que desde la caída del Rey en la Semana Santa de 2012 un 13 de abril en Botsuana junto a su amiga Corinna zu Sayn Wittgenstein, no han dejado de salir noticias negativas contra el Rey Juan Carlos que tiraban por tierra todas sus buenas acciones durante su largo mandato.

Atractiva y elegante como ella sola, adquirió su popularidad y título tras casarse con el príncipe Casimir zu Sayn- Wittgenstein, diez años más joven que ella. La boda civil tuvo lugar en Londres en 2000 y es que Corinna se casó en primeras nupcias en 1992 con el empresario británico Phillip Atkins con quien ese mismo año tuvo una hija, Nastassi y al poco timepo el matrimonio haría aguas. En, 2005, obtendría la nulidad de su primer marido y se casaría por la iglesia en Salzburgo (Austria). Al poco tiempo nació Alexander y la pareja se separaría siendo un bebé. Abiertas las puertas de los salones aristocráticos, Larsen 'consiguía mantener su título'. Sin embargo, años más tarde, su el padre de su exmarido, Alexander zu Sayn Wittgenstein aseguraba que desde que se formalizara el divorcio el 5 de octubre de 2005, había perdido el título de princesa como el de Alteza Real, pero que no querían ahondar en más por el bien del pequeño.

Alexander Kyril zu Sayn-Wittgenstein, contaba por aquel entonces 10 años de edad y ahora con 18 años recién cumplidos, su nombre ha pasado del anonimato a la luz pública.

El fin de su amistad con Corinna tras la caída en un momento de gran crisis en España ha ido abrió la caja de Pandora. Corinna no se quedó en silencio, y contó su verdad, e incluso fue portada de una entrevista en la revista ¡Hola! luciendo un reloj Cartier que, según ella, le había regalado el propio Rey Juan Carlos. Corinna reveló que tenía hasta casa en el Pardo conocido como La Angorrilla.

Corinna, la que fuera amiga del Rey Juan Carlos: Cartier, el collar espectacular de esmeraldas y diamantes que lució sin problema, las joyas que le gustan a la alemana

Pero al igual que hay otras mujeres, como Bárbara Rey ha sido discreta y poco ha contado, Corinna -muy bien relacionada dentro de las casas reales de Mónaco y de Reino Unido- lanzó un órdago a la corona española hablando de temas que nunca se habrían imaginado nuestros abuelos.

¿Quiénes son los nuevos amigos de la princesa Corinna?

Casi ocho años después de la caída de Botsuana y de ese perdón del Rey publicamente a su salida del hospital tan infantil, el tema sigue coleando. No es de extrañar que la Reina Sofía, su mujer, no corriera al hospital a estar a su lado en el momento en el que ingresó.

Si Bárbara Rey siempre ha defendido que de su casa desapareció documentación, la examiga del Rey Juan Carlos Corinna zu Sayn Wittgenstein asegura que lleva ocho años sufriendo abuso y que desde 2018 ha tratado de informar a la Casa Real. Atrás quedaron ese titular que dio en septiembre de 2014 en un desfile de la que se ha convertido en una de las firmas fetiche de la Reina Letizia, Carolina Herrera: "El Rey es mi amigo que lo será para siempre", declaraba Sayn Wittgenstein en unas profundas y larga entrevistas a la edición americana de 'Vanity Fair' y a el diario 'El Mundo'.

Corinna Larsen, hija del empresario danés fallecido Finn Bönning Larsen, alto cargo de las líneas aéreas brasileñas Varig, muy conocido en los círculos financieros y culturales alemanes por su labor de filántropo y de la alemana Ingrid Sauerland Larsen, tenía muy clara su postura en 2013, un año después de Botsuana: "Si alguien pretende utilizarme para atacar a la Familia Real, que no cuente conmigo".

Sin embargo, la situación ha dado un giro radical. Y es que según su abogado, Robin Rathmell, el Rey Juan Carlos le habría hecho supuestamente una donación de 65 millones de euros a ella y a su hijo cuyo origen investiga la Fiscalía de Ginebra, en concepto del cariño que sentía por ambos.

Según un comunicado remitido a Europa Press, el abogado de la empresaria alemana de 55 años en la actualidad, Robin Rathmell, ha afirmado que "desde 2018" ha intentado "en repetidas ocasiones" comunicarse "a través de los canales diplomáticos apropiados, la Embajada de España en Londres y la Casa Real incluida, sobre la campaña de abuso que se ha estado librando" contra ella "durante ocho años".

"Se hizo caso omiso de los graves asuntos que comunicamos en detalle y en ningún momento se reconoció, ni mucho menos se tomó medida alguna para remediar, tal abuso, que ha continuado hasta hoy", explica su letrado en este mismo comunicado, una noticia que ya salió hace un par de meses y una posición en la que se mantiene la aristócrata.

Y es que, supuestamente, ese dinero habría que devolverlo... ¿Por qué así lo pactaron? ¿O porque ya no hay amistad? ¿Donación, devolución? La devolución del dinero de Corinna a Juan Carlos supondría un delito de blanqueo de dinero y podría llevar a la guapa Corinna a prisión. Esto que habría quedado en la intimidad salía a la luz publica ya que se produjeron unas grabaciones realizadas por el comisario José Manuel Villarejo en el año 2015 en la que se deja a la luz que el Rey emérito la utilizó como testaferro para ocultar patrimonio y propiedades en el extranjero y que contaba con cuentas en Suiza a nombre de su primo, tal y como revelaban El Español y Ok Diario.

Corinna facilitaba estos detalles a Villarejo, mientras este se encontraba en prisión preventiva, preocupada en una reunión que ambos mantuvieron en la vivienda que ella tiene en un exclusivo barrio de Londres en el año 2015.

Tirando de aquellas conversaciones, se propiciaba un encuentro, a cargo del empresario Juan Villalonga, amigo de ambos, como explicaba El Español. Corinna explicaba que estaba viviendo una "pesadilla" porque el Rey había colocado diversas propiedades en Marruecos y otros lugares fuera de España a su nombre y en aquel momento, se las estaba reclamando, pero si ella las devolvía poniéndolas a nombre de terceros incurría en un delito de blanqueo.

"Ponen la propiedad dentro de la estructura, hacen como un contrato de venta y entonces parece todo perfecto. Claro, no pueden decir que el beneficiario es el otro (en referencia al rey emérito). Entonces, sin decírmelo, me lo ponen y después dicen: 'Esta no quiere devolverle la cosa'. Pero si lo hago, es money laundering. Es blanqueo", rezaba uno de los fragmentos de la grabación transcritos por El Español.

"Me está poniendo una presión bárbara para que le devuelva esas cosas, pero si lo hago vulnero la ley y puedo ir a la cárcel", relataba la empresaria a la que se le vio en su día hasta con la Infanta Cristina y su esposo Iñaki y el Rey Emérito en unos Premios Laureus ya que forma parte de la junta consultiva de dicha Fundación.

Siempre según el testimonio de Corinna, detrás había una maniobra para recuperar ese supuesto dinero a través del primo de Don Juan Carlos: "Ahora están tratando que yo pase estas cosas a Álvaro a través de Dante (señala en relación al abogado Dante Canonica) Están haciéndome la guerra porque yo no quiero cometer un delito".

"Ellos han puesto algunas cosas a nombre de su primo, que es Álvaro Orleans de Borbón, que también vive en Mónaco. Entonces las cuentas de banco en Suiza que no han... 'that didn't come back in the amnesty' las han puesto a su nombre", apunta en la grabación, afirmando en inglés que esas cuentas no afloraron con la amnistía fiscal en relación a la que aprobó el Gobierno en 2012 y que permitía repatriar fondos opacos.

Corinna tenía muy claro lo que suponía un nombre y los 25 años que le había costado de trabajo labrarlo: "La confianza y la reputación es muy importante en el tipo de trabajo que yo hago. Tarda en construirse, pero se pierde muy rápidamente. Estoy en la liga de los grandes, y eso es muy duro. Soy mujer, y encima rubia, lo cual complica las cosas aún más", comentaba en declaraciones en El Mundo.

La fuerte amistad del Rey Juan Carlos y Corinna zu Sayn Wittgestein se ha convertido en arma de doble filo. Los 65 millones que habría traspasado el marido de la Reina Sofía a Corinna son los millones más envenenados de la historia.