MADRID, 9 Mar. (CHANCE) -
Como cada segundo lunes de marzo y cumpliendo con la tradición, la Familia Real Británica se ha dado cita en la Abadía de Westminster con motivo del Día de la Commonwealth, una de las citas más importantes para la Reina Isabel II. Pero hoy sin duda las miradas se han centrado en el príncipe Harry y Meghan Harry, ya que este día pasará a la historia como la despedida de los Duques de Sussex de la corona británica como miembros senior.
Tras una gira de despedida, cumpliendo así con sus últimos compromisos profesionales vinculados a la realeza y antes de abandonar su derechos y obligaciones el próximo 31 de diciembre, los duques de Sussex se han sumado al resto de la familia antes de poner rumbo a Canadá.
A la cita han acudido también el príncipe de Gales y la duquesa de Cornualles, así como los duques de Cambridge y los condes de Wessex, además de invitados de los 54 países de la Mancomunidad de Naciones venidos de África, Asia, el Caribe, América, el Pacífico y Europa, lo que suma casi un total de 2.000 invitados entre los que destacan miembros políticos y de la sociedad civil. Entre los rostros destacados fuera de la familia real ha destacado el de Geri Halliwel, o el del primer ministro Boris Johnson y a su prometida Carrie Symonds.
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Los duques de Sussex han sido de los primeros en llegar, acaparando la atención por el trasfondo de su aparición. Después lo han hecho los duques de Cambridge. Sin embargo, no se ha producido la imagen de los cuatro juntos y no han acompañado a la Reina en su entrada como en otras ocasiones sino que han sido trasladado a sus asientos. Cabe recordar que es el reencuentro entre Harry y William, así como entre Meghan y Kate, después de los rumores de mala relación entre las partes. Antes de la Reina han llegado el príncipe Carlos y Camilla.
Una vez con todos los invitados dentro y tras la llegada de la Reina, todos han cantado God save The Queen, dando comienzo al desfile de banderas de todos los países que forman la Commonwealth, así como bailes y actuaciones, recayendo el protagonismo en Alexandra Burke y Craig David.
Como jefa de la Commonwealth, la Reina Isabel ha pronunciado unas palabras en las que ha defendido la diversidad y ha invitado a hacer entre todos un mundo mejor.
No han podido ser todos los miembros de su familia los que escucharan estas palabras, pues su hijo el duque de York, así como Eugenia y Beatriz, han sido los grandes ausentes de la velada, siendo el príncipe Andrés alejado de la vida institucional tras su implicación en el caso del magnate y pedófilo Jeffrey Epstein.
