Adriana Ugarte, "La señora": "Sí he vivido un amor tan apasionado como el de mi personaje"

Adriana Ugarte
EP
Actualizado: jueves, 25 junio 2009 11:52

Adriana Ugarte era hasta hace muy poco tiempo una desconocida para muchos, pero poco a poco se ha convertido en una de nuestras actrices más brillantes. La madrileña va por el buen camino, ya que con tan sólo veinticuatro años ya ha estado nominada en los reconocidos Premios Goya, como Mejor Actriz Revelación por su genial interpretación en "Cabeza de perro". Un muestra de que esta joven actriz ya es considerada una de las grandes promesas del cine español.

Fue el pasado año cuando Adriana se ha convirtió en Victoria de Castro, la gran apuesta de TVE para su nueva serie de época, "La señora". Ahora, la joven actriz vuelve a meterse en la piel de esa señorita de provincias, crecida en el seno de una acomodada familia burguesa y que se enamora locamente de un sacerdote, papel que interpreta, también con mucho éxito, el guapo Rodolfo Sancho. Una bonita y complicada historia de amor que viven los dos jóvenes mientras sienten muy de cerca las extremas diferencias sociales que se vivían en la difícil década de los años veinte. Una segunda temporada que viene abalada por el éxito de la primera, y que Adriana ha vivido con gran intensidad por el cambio radical que mostrará su personaje, además de por los cuatro duros meses de grabación que ha sufrido por la lesión que tuvo en su pierna, de la cual ya está totalmente recuperada...

- Adriana, ¿qué nos puedes contar de esta segunda temporada de "La señora"?- (Sonríe) Poco. Sólo puedo decir que el triángulo amoroso se mantiene casi hasta el final. Y mi personaje va a ser mucho más maduro, más encerrado y va a seguir luchando. Una segunda etapa de Victoria luchando por su libertad.

- El personaje va a cambiar.

- Sí. Se templa muchísimo. Antes estaba muy asalvajada y ahora se va a volver más consecuente y se va a dar cuenta de que sus decisiones tienen consecuencias gordas.

- ¿No va a sufrir tanto?

- Va a sufrir mucho pero va a aprender a no sufrir. Va a ser más fría.

- ¿Cómo una chica tan joven como tu lleva el meterse en la piel de una mujer tan atormentada?

- A veces meterte en la piel de un personaje que no es de tu época y que está sometido a unas circunstancias tan difíciles...es complicado. No sabía al principio cómo ponerme en su lugar. Pero hoy en día encuentras situaciones muy similares, aunque hayan pasado muchas décadas.

- ¿Personalmente qué piensas de la relación de tu personaje con un cura?

- No es una historia en la que se líe directamente con un cura, sino que están enamorados desde antes de él convertirse en sacerdote. Sí es cierto que hay puntos picantones, cuando se lían y él va con la sotana, pero eso me encanta (ríe). Si remueve y produce nervios, mejor.

- ¿Has vivido un amor tan apasionado y tan prohibido como este?- Sí. Como soy tan apasionada todos mis amores han sido muy apasionados (ríe). Tan prohibido no, pero prohibidillo sí... (ríe)

- ¿Cuando sales del plató consigues quitarte de encima los problemas de tu personaje?

- Al irme del plató tengo que estudiar, así que si hay dramón al día siguiente... lo leo al final (ríe). No me lo llevo a casa, o por lo menos lo intento.

- ¿Victoria te ha ayudado en tu vida para ver las cosas de otra manera?

- No, y lo intento... Me enseña cosas pero cuando me pasa una cosa, se me olvida todo lo aprendido. Pero si me pasa algo muy gordo, me disgusto muchísimo. (Sonríe) Yo soy muy exagerada.

- Adriana, ¿qué le recomendarías a tu personaje en la situación personal en la que se encuentra?- Le diría que piense en cuál es el bien y cuál es el mal. Ángel le hace mucho mal (ríe). Pero yo le aconsejaría que se hiciese lesbiana o que se olvidara del amor (risas). Igual lo hace...

- Estás cursando la carrera de Filosofía, Adriana. ¿Vas a continuar con ello o lo vas a dejar más aparcado por la interpretación?

- Voy a seguir. Lo intento compaginar con esto pero muy poquito. Intento leer cosas que mandan pero sí quiero terminarlo.

- Cuando no trabajas, ¿qué te gusta hacer?

- Mirar. Soy una mirona (risas). Me encanta. Me gusta mucho pasear y sentarme a mirar. Y también me gusta mucho bailar.

- ¿Te cuidas mucho?

- Me cuido un poco pero no voy al gimnasio porque me deprimo muchísimo. Voy a nadar y hago pilates...

- ¿Qué tal estás de la lesión de la pierna?

- Bien, bien. Han sido cuatro meses duros. Ya por fin estoy bien. Flexiono un poco y me duele pero... Estoy con rehabilitación ahora mismo.

- ¿Cómo lo has llevado?

- A veces muy duro porque era venir a trabajar con una bota ortopédica que me permitía andar pero no podía correr. Tenían que cambiar el sentido de muchas secuencias porque si tenía que salir de escena corriendo, ya no se podía hacer. Me sentía mal. Pero eso me enseñó muchísimo.

- Cuando termine la grabación de la serie, ¿qué planes tienes?

- De momento estrenar "Castillos de cartón" y empezar la promoción. Y después vacaciones, que llevo un tiempo sin parar.

- Estáis grabando la tercera temporada ya. ¿Piensas en la cuarta...?- No sé. Me lo tendría que pensar.

- ¿Y cómo te gustaría que fuese el final de tu personaje en la serie?

- Feliz. Me da igual como sea pero feliz.