MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) - 'Oumuamua fue visto por primera vez por la encuesta Pan-STARRS-1 40 días después de su paso más cercano al Sol (el 9 de septiembre de 2017). En este punto, estaba a aproximadamente 0,25 UA del Sol (un cuarto de la distancia entre la Tierra y el Sol), y ya estaba saliendo del Sistema Solar. En ese momento, los astrónomos notaron que parecía tener una alta densidad (indicativa de una composición rocosa y metálica) y que estaba girando rápidamente. Basándose en esto, Bialy y Loeb calcularon la probable forma, el grosor y la relación masa-área que tendría un objeto tan artificial. También intentaron determinar si este objeto podría sobrevivir en el espacio interestelar, y si podría o no resistir las tensiones de tracción causadas por la rotación y las fuerzas de marea. Lo que encontraron fue que una vela con solo una fracción de milímetro de espesor (0,3-0,9 mm) sería suficiente para que una lámina de material sólido sobreviviera el viaje a través de toda la galaxia, aunque esto depende en gran medida de la densidad de masa de 'Oumuamua. Gruesa o delgada, esta vela podría soportar colisiones con granos de polvo y gas que impregnan el medio interestelar, así como fuerzas centrífugas y de marea.