Muestras de viento solar apuntan a nueva física en estallidos solares

Una imagen de regiones activas en el Sol del Observatorio de Dinámica Solar de la NASA. El gas caliente brillante traza los giros y bucles de las líneas del campo magnético del Sol.
Una imagen de regiones activas en el Sol del Observatorio de Dinámica Solar de la NASA. El gas caliente brillante traza los giros y bucles de las líneas del campo magnético del Sol. - NASA SOLAR DYNAMICS OBSERVATORY/ AIA
Actualizado: lunes, 17 febrero 2020 10:12

   MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Muestras de viento solar tomadas por una antigua misión de la NASA, analizadas con la tecnología más avanzada, sugieren que hay nueva física en las eyecciones de masa coronal en nuestra estrella.

   El nuevo estudio, dirigido por la Universidad de Hawai'i (UH) en Manoa, ha ayudado a refinar la comprensión de la cantidad de hidrógeno, helio y otros elementos presentes en los arrebatos violentos del Sol y otros tipos de "viento" solar, una corriente de átomos ionizados expulsados del sol.

   Las eyecciones de masa coronal (CME) son explosiones gigantes de plasma que brotan del sol y salen al sistema solar a velocidades de hasta 3 millones de kilómetros por hora. Al igual que el sol mismo, la mayoría de los átomos de un CME son hidrógeno. Cuando estas partículas interactúan con la atmósfera de la Tierra, conducen a las brillantes luces multicolores de la aurora boreal. También tienen el potencial de noquear las comunicaciones, paralizando la civilización moderna. Y su causa es prácticamente un misterio.

   El investigador de la Escuela de Ciencia y Tecnología del Océano y la Tierra (SOEST) UH Manoa, Gary Huss, dirigió un equipo de científicos en la investigación de una muestra de viento solar recolectada por la misión Génesis de la NASA. Sus resultados han sido publicados en Meteoritics & Planetary Science.

   La mayor parte de nuestra comprensión de la composición del sol, que constituye el 99,8% de la masa del Sistema Solar, proviene de observaciones astronómicas y mediciones de un tipo raro de meteorito. En 2001, la sonda Genesis se dirigió al espacio para recolectar muestras de viento solar en materiales puros y llevar el material a la Tierra para estudiarlo en un laboratorio. Esas muestras representaban partículas recolectadas de diferentes fuentes de viento solar, incluidas las arrojadas por las CME.

   Las muestras de Genesis permitieron una evaluación más precisa de la abundancia de hidrógeno en CME y otros componentes del viento solar. Alrededor del 91% de los átomos del Sol son hidrógeno, por lo que todo lo que sucede en el plasma del viento solar está influenciado por el hidrógeno.

   Sin embargo, medir el hidrógeno en las muestras de Génesis resultó ser un desafío. Un componente importante del trabajo reciente fue desarrollar estándares apropiados utilizando minerales terrestres con cantidades conocidas de hidrógeno, implantadas con hidrógeno por un acelerador de laboratorio.

   Una determinación precisa de la cantidad de hidrógeno en el viento solar permitió a los investigadores discernir pequeñas diferencias en la cantidad de neón y helio en relación con el hidrógeno expulsado por estas eyecciones solares masivas. El helio y el neón, ambos gases nobles, son difíciles de ionizar.

   Las nuevas mediciones de hidrógeno mostraron que tanto el helio como el neón se enriquecieron en eyecciones de masa coronal, proporcionando pistas sobre la física subyacente en el Sol que causa las eyecciones de masa coronal.

   En eventos muy energéticos, "el material expulsado parece enriquecerse casi sistemáticamente en átomos que requieren la mayor cantidad de energía para ionizarse", dijo Ryan Ogliore, coautor y profesor asistente de física en la Universidad de Washington en St. Louis. "Eso nos dice mucho sobre la física involucrada en las primeras etapas de la explosión en el Sol".

   Este hallazgo lleva a los investigadores un paso más cerca de comprender los orígenes de estos eventos solares particulares.

Leer más acerca de: