Primaveras más cálidas propician plantas menos productivas en verano

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ANITA MARTINZ/WIKIMEDIA - Archivo
Actualizado: miércoles, 3 octubre 2018 18:57

   MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Un estudio sobre los efectos de las primaveras más cálidas sobre el crecimiento de las plantas en el hemisferio norte muestra una productividad de la planta sustancialmente inferior posteriormente.

   Los resultados cuestionan la validez de los modelos climáticos actuales que incluyen la productividad de la planta al evaluar la cantidad de carbono capturado por la vegetación y lo que queda en la atmósfera.

   Utilizando 30 años de imágenes satelitales, un equipo internacional dirigido por la Universidad de Leeds, en Reino Unido, examinó 41 millones de km2 de terreno en el hemisferio norte. Descubrieron que la aparición temprana de la productividad de la planta causada por primaveras más cálidas no continúa en los meses de verano y otoño.

   Anteriormente, se creía que el inicio temprano de la temporada de crecimiento debido al aumento de las temperaturas globales extendía la temporada de crecimiento de la vegetación, lo que le permitía obtener más biomasa durante su ciclo de vida y, por lo tanto, aumentar el proceso de fotosíntesis e incrementar la cantidad de carbono capturado y almacenado.

   Ahora, el equipo ha descubierto que los efectos adversos causados por una primavera más cálida, particularmente los relacionados con el suministro de menos agua, reducen sustancialmente cualquier beneficio de temporadas cálidas más largas. En muchas áreas, la biomasa de las plantas disminuyó en los meses de verano y otoño, lo que limita significativamente la captura de carbono.

   El estudio, publicado en 'Nature', muestra que los modelos climáticos actuales subestiman la reducción de la productividad de la planta y, por lo tanto, sobreestiman la cantidad de carbono que absorben los ecosistemas terrestres a lo largo del año. El autor principal del estudio, el el doctor Wolfgang Buermann, de la Escuela de Tierra y Medio Ambiente de Leeds, señala: "Las regiones del norte han experimentado un calentamiento sustancial desde principios de la década de 1970, cambiando la cantidad de ecosistemas que funcionan".

   Y continúa: "Ha habido una comprensión limitada del impacto total de inviernos más cortos y veranos más largos en las plantas hasta ahora. La disponibilidad de imágenes de satélite nos ha permitido estudiar todas las regiones del norte del mundo y obtener una imagen completa de cómo las plantas están reaccionando el cambio de las estaciones".

   "La preocupación es que los modelos climáticos utilizados para predecir los impactos futuros del cambio climático no reflejen lo que las observaciones muestran claramente. Se pensó que el inicio temprano de la primavera ayudaría a la productividad de la planta en los meses de verano y otoño. Sin embargo, podemos ver que cuando ha habido una primavera temprana la productividad de la planta paga el precio más adelante en el año. Parece que los valiosos recursos necesarios para el crecimiento de las plantas como el agua no están disponibles en abundancia y cuando se consumen a principios de la temporada de cultivo, faltan más adelante", explica.

CÁLCULOS DE LAS CANTIDADES DE FOTOSÍNTESIS Y BIOMASA

   El doctor Buermann agrega: "Sobre la base de predicciones climáticas futuras, las primaveras más cálidas se convertirán en el estándar. Es muy necesario asegurarse de que nuestros modelos incorporen con precisión los efectos de las primaveras más cálidas en nuestros ecosistemas y cómo esto a su vez afecta el cambio climático. Sin esto, no podemos predecir con exactitud cómo las temperaturas globales pueden continuar cambiando, el efecto que esto podría tener sobre el clima o la amenaza potencial para la salud pública".

   El coautor del estudio, el doctor Matthias Forkel, de la Universidad Tecnológica de Viena, Austria, dice: "Ya sabíamos que el curso temporal del crecimiento de las plantas ha cambiado significativamente como resultado del cambio climático. Estos mecanismos son complicados y regionalmente diferentes. Desafortunadamente, eso cambia las previsiones climáticas en una dirección desagradable. Tenemos que asumir que las consecuencias del calentamiento global serán aún más dramáticas de lo que se calculó previamente".

   El doctor Forkel explica cómo se estudiaron las imágenes de satélite de todo el mundo al norte del paralelo 30, desde el sur de Europa y Japón hasta las regiones de tundra en el extremo norte. Estas evaluaciones permitieron al equipo determinar punto por punto la cantidad de fotosíntesis que tiene lugar y la cantidad de biomasa que se obtiene.

   Con imágenes satelitales, el equipo pudo examinar las regiones del norte en busca de verdor asociado con una vegetación productiva saludable. Evaluaron las correlaciones entre la temperatura, la época del año y el grado de verdor en todo el paisaje del norte, incluidas zonas de Reino Unido, Canadá, Alemania, Francia y Rusia.

   Las observaciones satelitales mostraron que el hemisferio norte se volvió más verde en la primavera, pero entre el 13 y el 16 por ciento de la superficie total mostró efectos adversos en los meses posteriores. Esto contrasta con los modelos actuales del ciclo del carbono que muestran efectos adversos entre 1 y 14 por ciento. Los efectos negativos de las primaveras más cálidas se localizaron particularmente en el oeste de América del Norte, Siberia y partes del este de Asia.

   El estudio sugiere que los recursos de agua agotados asociados con una temporada de primavera más cálida podrían ser una causa importante de las reducciones. El crecimiento abundante de la planta genera una mayor demanda de agua y evaporación, lo que impide que las plantas tengan suficiente agua más adelante en el año para mantener la productividad. Ciertas plantas también pueden tener un periodo de crecimiento naturalmente predeterminado, que no puede prolongarse y un mayor crecimiento repentino da como resultado una decadencia anterior.