Aislan cepas de leche materna, fuente considerada hasta ahora estéril, beneficiosas para el sistema inmune e intestinal

Actualizado: miércoles, 18 enero 2006 22:07


SEVILLA, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un estudio elaborado por 'Puleva Biotech', y que ha requerido más de seis años de investigación, ha conseguido aislar por vez primera cepas procedentes de la leche materna --considerada por la comunidad científica hasta el momento como una fuente estéril-- capaces de mejorar el sistema inmunitario del niño, el tránsito intestinal y la absorción de vitaminas y minerales.

En rueda de prensa en Sevilla, el subdirector de Puleva Biotech, Julio Boza, explicó que este estudio, en el que participaron unas 200 madres e hijos de éstas con edades comprendidas entre los 4 y 12 años, encontró más de 3.000 colonias de bacterias procedentes de la leche materna.

Tras este descubrimiento, continuó, "los investigadores consiguieron demostrar las características probióticas de al menos cinco especies del género lactobacillus", capaces de colonizar el intestino y promover la flora intestinal.

De igual forma, resaltó las propiedades "beneficiosas" que estas bacterias probióticas ejercen en el sistema inmune del niño "disminuyendo de las reacciones adversas en sistemas inmunitarios alterados como por ejemplo el de los alérgicos".

En concreto, Boza detalló que dichas cepas, sujetas bajo patente para uso de lecha materna, son las 'L.coryniformis CECT 5711', L.salivarius CECt 5713', 'L.gasseri CECT 5714', 'L.gasseri CECT 5715' y 'L. fermentum CECT 5716'.

Al hilo de ello, el subdirector de Puleva Biotech indicó que esta compañía ha desarrollado el producto 'Puleva Max defensas', que consideró como "el primer lácteo fermentado enriquecido con probióticos procedentes de la leche materna dirigidos a niños de entre 4 y 12 años".

Tras estas investigaciones, Boza avanzó a Europa Press la intención de esta compañía de llevar a cabo un nuevo estudio en los hospitales Virgen de las Nieves y San Cecilio, ambos en Granada, en el que participarían unos cien niños y que se centraría en la administración de fórmulas infantiles que contengan estos probióticos, frente a otras fórmulas que no lo contengan "para comprobar el margen de seguridad".

"Primero tenemos que obtener los pertinentes permisos y la aprobación por parte del Comité Etico del Hospital Virgen de las Nieves", precisó Boza, quien dijo que el siguiente paso sería ensayar la fórmula "con niños inmunodeprimidos o con infecciones".