Científicos daneses ensayan la efectivdad de una planta transgénica para detectar minas antipersona

Actualizado: martes, 9 mayo 2006 19:32

MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -

Un equipo de científicos daneses ensaya la efectividad de una variedad modificada genéticamente de la planta 'Arabidopsis thaliana', para detectar la presencia de explosivos en el suelo donde crecen. El objetivo es lograr, mediante la manipulación de la planta, que cambie de color, de verde a rojo, cuando se encuentre en inmediaciones a algún tipo de elemento explosivo.

Según informó hoy la Fundación Antama, citando al Instituto para la Salud y la Protección de los Consumidores del Centro Conjunto de Investigación (JRC), dependiente de la Comisión Europea, el experimento, promovido por la empresa danesa Aresa Biodetection, se desarrollará en campos de Dinamarca desde junio a noviembre de este año y consistirá en probar la efectividad de esta planta para modificar su color de verde a rojo cuando se cultive junto a esta clase de explosivos.

La misma fuente destacó que el objetivo del ensayo es "dar un paso más en la lucha contra la presencia de minas antipersona, de las que se estima que existen en el mundo unos 100 millones de ejemplares aún sin explotar". Con esa intención se manipuló genéticamente a la planta para lograr su cambio de coloración al detectar explosivos y también se le eliminó la hormona del crecimiento, para impedir que la misma se expanda por el entorno donde se cultiva.

Los responsables del proyecto explicaron que "la mutación 'tt4' que se aplica en esta variedad impide la producción aleatoria de pigmentos rojos, causados por factores externos como, por ejemplo, el crecimiento en condiciones de tensión para la planta. Sin embargo, la planta puede presentar pigmentación roja gracias a la introducción del gen CHS en conexión con un elemento sensible a los explosivos. En este sentido, las plantas sólo pueden modificar su color si crecen en presencia de estos artefactos".

Este trabajo de investigación busca dar respuesta a la denuncia que realizó Naciones Unidas en abril pasado, con motivo de la conmemoración del primer Día Internacional de la lucha contra las minas, que los menores de 80 países ven amenazada su vida debido a la presencia de restos explosivos de guerras y otros artefactos que no han estallado. Además, recuerda que al menos el 20 por ciento de las 15.000 a 20.000 personas que mueren, o quedan discapacitadas cada año a causa de este tipo de explosivos, son niños.