El CSIC participa en el desarrollo de un sensor subcutáneo para controlar el nivel de glucosa en diabéticos

Actualizado: martes, 9 enero 2007 19:30


MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) participa en el desarrollo de un microsensor que, implantado bajo la piel, será capaz de controlar los niveles de glucosa de los enfermos diabéticos, avisar al centro médico e, incluso, suministrar insulina al paciente de forma automática, en caso de que precise un ajuste urgente del tratamiento, informaron hoy fuentes del CSIC. El proyecto, denominado 'Paul Cezanne', cuenta con un presupuesto de 14 millones de euros, aportado en parte por la Unión Europea, y reúne a un total de 15 instituciones, procedentes de ocho países diferentes. La representación española corresponde al Centro Nacional de Microelectrónica del CSIC.

El coordinador del proyecto en España e investigador del CSIC, Carlos Domínguez, explicó cómo funcionaría el futuro microsensor. "Se implanta en los pacientes un pequeño sensor óptico conectado, de manera inalámbrica, con un dispositivo portátil como, por ejemplo, un teléfono móvil. El sensor envía, cada cierto tiempo, los niveles de glucosa al receptor, el cual los almacena y procesa para que los pacientes los consulten cómodamente", manifestó. "El dispositivo --añadió-- podrá, de esta manera, alertar de una subida de azúcar y, en tiempo real, mandar las gráficas al centro médico del enfermo, para que éste sea tratado".

Domínguez expresó, además, que "es posible adaptar el dispositivo para que realice una dosificación automática de insulina, en caso de riesgo, a través de una bomba de insulina". Para determinar los niveles de glucosa, el sensor utiliza una proteína, de origen bacteriano, con sensibilidad a este componente. Los investigadores utilizan técnicas de ingeniería genética para combinar ese receptor con un par de moléculas proteicas fluorescentes. De este modo, se consigue una respuesta fluorescente que determina la concentración de glucosa en sangre, explicaron desde el CSIC.

"En la actualidad, los enfermos de diabetes utilizan mayoritariamente el método de punción del dedo para la supervisión de sus niveles de glucosa en sangre", manifestó este especialista, quien resumió las ventajas que ofrece el nuevo método. "La punción --dijo-- ofrece una lectura en un momento determinado, mientras que el sistema 'Paul Cezanne' puede llegar a recoger nuevos datos cada diez minutos. Además, al estar automatizado, evita que el paciente deba preocuparse por analizar sus niveles de glucosa".

Una vez desarrollado el sensor, la participación española en el proyecto se dirige a reducir al mínimo el tamaño del dispositivo. "El diseño que barajamos tiene la misma dimensión que un cuarto de sello, con un espesor de cinco milímetros", precisó Domínguez.

Por último, los responsables del sensor comentaron que este proyecto internacional recaba en la actualidad información entre diabéticos de toda Europa para conocer sus carencias y mejorar el dispositivo, adaptándolo a sus necesidades reales. El cuestionario puede contestarse en distintos idiomas a través de Internet y el resultado de la encuesta servirá, por ejemplo, para decidir cuál es el mejor formato para el dispositivo que almacene los datos. En principio, se baraja la idea de incluirlo en aparatos portátiles, como teléfonos móviles o agendas electrónicas.