MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un entrenamiento previo 4 o 6 semanas antes de practicar el el
esquí evitaría un 80 por ciento de las lesiones que sufren los
aficionados a este deporte, según señaló hoy en un comunicado el jefe
del Servicio de Fisioterapia de la Clínica Armstrong Internacional de
Madrid, Horacio Bobadilla.
Así, recomienda la realización de ejercicios aeróbicos para el
sistema cardiovascular, necesarios para la práctica de cualquier
actividad física (carrera, bicicleta o natación); así como
anaeróbicos, para desarrollar la fuerza muscular específica de los
diferentes grupos musculares. Asimismo, se debe entrenar la capacidad
de las articulaciones para soportar los diferentes cambios de peso y
posiciones.
Al mismo tiempo, recuerda la importancia de un buen equipamiento,
donde las botas ocupan un papel fundamental a la hora de evitar
lesiones. La protección del frío en manos, pies, cabeza y orejas es
muy importante y es imprescindible una buena hidratación mediante la
ingestión frecuente de líquidos.
En la práctica del esquí se dan 3 lesiones por cada 1.000
esquiadores, y un tercio de ellas son en la rodilla, sobre todo, las
lesiones del ligamento cruzado anterior. El 50 por ciento se
localizan en las extremidades inferiores y otro 40 corresponden a
hombros, manos y clavículas. Finalmente, un 10 por ciento son
lesiones cervicales, lumbares, dorsales o por sección medular.
Por otro lado, este experto ha detectado en los últimos años un
incremento de lesiones graves en niños, debido, por un lado, a que el
nivel de competición al que se les somete es cada vez mayor y, por
otro, a que éstos no tienen resistencia en los huesos y en las
articulaciones, su ergonomía y esquema corporal no es el mismo que el
de un adulto. Este tipo de lesiones puede afectar en ocasiones al
crecimiento y desarrollo del niño.