El físico Juan Ignacio Cirac afirma que los físicos españoles están "en desventaja" y reclama más financiación

Actualizado: miércoles, 24 mayo 2006 16:48


MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -

El físico español Juan Ignacio Cirac, ganador del Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2006, aseguró hoy a Europa Press que en España existen "muy buenos físicos a nivel internacional", aunque están "en desventaja" porque "no tienen el apoyo del que gozan en otros países", lo que provoca que "no se puedan conseguir algunas metas".

En este sentido, destacó que "hace falta más financiación por parte del Gobierno y las empresas", aunque también es necesario que haya "tradición". "Si uno se va a Alemania, a otros países, la ciencia está metida dentro de la sociedad. La tradición es algo que se coge poco a poco, y en España se está empezando ya a introducir", dijo.

No obstante, el profesor Cirac, que actualmente dirige en Garching (Alemania) el Instituto Max Planck de Óptica Cuántica, aseguró que no se plantea volver a España porque allí está "muy contento".

"Las posibilidades que tengo en este instituto no las puedo desarrollar en otro sitio", dijo Cirac, que no obstante recordó que durante el tiempo en el que estuvo trabajado en la Universidad de Castilla-La Mancha le trataron "muy bien" y le ofrecieron "todo lo que quería". "Pero claro, lo que no hay allí es compañeros que trabajen en el mismo tema al nivel que se trabaja en Alemania", donde "están los mejores grupos e institutos del mundo" en su terreno.

Por otro lado, y tras asegurar que el galardón es "lo más bonito e importante" de su carrera, el profesor Cirac se refirió a su campo de investigación, y explicó en este sentido que la base está en utilizar una teoría de la física, la llamada física cuántica, que se ocupa de objetos tan pequeños como los átomos o las moléculas, "para procesar información, comunicar, y hacer cálculos numéricos de una manera mucho más eficaz y segura".

Así, explicó a Europa Press que trabaja básicamente en dos campos, el de las comunicaciones y el de la computación. En el primer caso, su equipo está estudiando el desarrollo de futuras "aplicaciones comerciales de sistemas de comunicación secretos basados en la mecánica cuántica, lo que se llama la criptografía cuántica, que permite enviar mensajes secretos sin que nadie los pueda leer", ya que constituye "un método mucho más seguro que los que se utilizan actualmente".

A juicio de Cirac, este método se generalizará en el futuro de forma que las personas "podrán comunicarse de una manera mucho más segura y eficiente". "Mandando mucha menos señal podremos enviar más información", explicó.

LOS FUTUROS ORDENADORES CUÁNTICOS

El otro campo donde se centra el trabajo de Cirac y su equipo es el de la computación cuántica, que se basa en la realización de cálculos utilizando las reglas de la mecánica cuántica y que tendrán su aplicación en el futuro en un nuevo tipo de ordenadores "basados en otras reglas de juego" y que podrán "hacer las cosas que hacen los actuales de una manera infinitamente más rápida".

"Al utilizar unas nuevas leyes de la física, las leyes del mundo microscópico, pueden hacer cosas que hoy día no se pueden hacer, de tal forma que los cálculos se harán de una manera mucho más rápida", dijo.

No obstante, explicó que a pesar de que ya hay prototipos muy pequeños y que ya se trabaja en una segunda generación de computadores que "permitirán hacer algunas simulaciones" y "cálculos muy concretos" tendrán que pasar "muchos años" hasta que puedan estar disponibles ordenadores cuánticos que hagan cualquier cálculo como los de hoy en día. "En los próximos veinte años seguro que no", concluyó.