Un geólogo afirma que los estudios en La Antártida demuestran que los humanos son responsables del cambio climático

Actualizado: jueves, 27 julio 2006 22:00


CASTRO URDIALES, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -

El profesor de Geología de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de Madrid, Jerónimo López Martínez, destacó hoy que los estudios llevados a cabo en La Antártida demuestran la responsabilidad de los humanos en el cambio climático, y alertó sobre los efectos adversos de este fenómeno.

López Martínez hizo estas aseveraciones en una conferencia sobre 'La Antártida y el cambio climático', en el marco de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria en Castro Urdiales.

Jerónimo López Martínez (Galicia, 1951), que también es presidente del Comité Científico de Investigación Antártica en España, disertó sobre el destacado papel que tienen los polos en la tierra, sobre todo la Antártida en la situación actual de cambio climático.

El geólogo explicó que desde el siglo XIX hay una aceleración en el aumento de las temperaturas y el clima de la tierra experimenta unos cambios muy bruscos. "Es muy importante aclarar que el clima ha cambiado siempre, pero desde la revolución industrial, con las emisiones masivas de CO2, coincide con una aceleración en las temperaturas", argumentó.

El experto en geodinámica, indicó que en esta situación los polos y las zonas que albergan más hielo en la tierra tienen un papel esencial porque "no sólo se estudian para explorar la zona sino que interviene en los sistemas naturales y a través de la atmósfera y de los océanos trasmite su efecto al conjunto del planeta".

En su opinión, "la Antártida y sus hielos son un registro único en la tierra de cómo ha sido el clima en el pasado y las investigaciones al respecto nos pueden ayudar a valorar en qué medida los humanos somos culpables del cambio actual".

LA ANTÁRTIDA

En su intervención, el profesor de la Universidad Autónoma mostró imágenes y ejemplos de las investigaciones en el polo. También, explicó las peculiaridades de vivir y trabajar en un lugar con un clima tan hostil.

Para Jerónimo López, "la Antártida es un lugar extraordinario para hacer un seguimiento de cómo evoluciona el clima de las diferentes estaciones lejos de los focos de contaminación humana".

Destacó además que "la Antártida es el único lugar en el mundo que no pertenece a ningún país y que está regido por el Tratado Antártico en el que 28 países, España desde 1988, toman las decisiones por unanimidad".

INVESTIGACIÓN

Jerónimo López Martínez es el presidente del Comité Científico de Investigación Antártica en España (SCAR). Se trata de una organización no gubernamental que está constituida por científicos cuyos objetivos son promover y coordinar la investigación científica que se desarrolla en la Antártida. Es el órgano asesor, en materia científica, del Tratado Antártico.

El SCAR fue galardonado en 2002 con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional como reconocimiento a los valores que representa y a la labor desarrollada desde su creación en 1958. Actualmente está constituido por 32 países, entre los que se encuentra España desde su ingreso en 1990.

La investigación antártica española se financia a través de convocatorias públicas de proyectos de investigación que, desde 1988, se desarrollan en el marco de los Planes Nacionales de I+D. Dicha investigación abarca diferentes disciplinas, habiéndose dedicado principalmente a los campos de la biología, geología, geofísica, estudios atmosféricos, cartografía y geodesia, glaciología y oceanografía física.

España posee en la Antártida la base Juan Carlos I, en la isla de Livingston, y la base Gabriel de Castilla en la isla Decepción, ambas en el archipiélago de las Shetland del Sur. El buque de investigación oceanográfica Hespérides participa en las campañas antárticas y se cuenta con el buque Las Palmas para apoyos logísticos.

El próximo mes de septiembre, el SCAR celebrará en Granada en VII Simposio Español de Estudios Polares con motivo de la conmemoración del 50 aniversario del Año Geofísico Internacional y del 125 aniversario del primer Año Polar Internacional, celebrado el último tercio del siglo XIX.