Los investigadores de Atapuerca (Burgos) creen que en la sierra vivió un grupo de caníbales durante centenares de años

Actualizado: viernes, 21 julio 2006 21:12


ATAPUERCA, (BURGOS), 21 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los hallazgos de nuevos fósiles en el yacimiento de la Gran Dolina, en el nivel TD6, en la sierra de Atapuerca en la presente campaña han llevado a los investigadores a concluir que sus hipótesis sobre el canibalismo eran equivocadas sobre el Homo Antecessor, según indicó el codirector Eudald Carbonell.

Según consideró, durante "seguramente centenares de años", en la sierra burgalesa habitó un grupo de caníbales, que tenían "costumbre" no de canibalismo únicamente gastronómico, sino que lo practicaban "como costumbre cultural".

Agregó que la mayoría de los homínidos canibalizados eran niños y niñas, de grupos "que no vivían en la sierra de Atapuerca", a manos de los que ya estaban asentados en los yacimientos. Los investigadores fecharon estas prácticas en hace aproximadamente 800.000 años.

Carbonell reiteró que esta actividad supone un cambio en los planteamientos que tenían hasta la fecha los codirectores de las excavaciones, y que "va a revolucionar el conocimiento de la especie Antecessor".

El codirector destacó también la confirmación en esta campaña de que los cuchillos de piedra hallados en los yacimientos representan cerca de un 30 por ciento de las herramientas que utilizaban estos homínidos, por lo que concluyó que algunos les servían para realizar los "descuartizamientos para comerse a estos homínidos".

En su opinión, Gran Dolina será un yacimiento "básico" para entender el proceso evolutivo, ya que de sus hallazgos podría concluirse que en el último millón de años, habría una cierta correlación de grupos que vivían en Europa, y que se desarrollaron biológica y culturalmente de forma distinta los grupos que entraban de África o de Asia.

DECENAS DE FOSILES ENCONTRADOS

En la presente campaña los investigadores hallaron una decena de fósiles de Homo Antecessor y expresaron su convicción de que en las próximas seguirán apareciendo "centenares".

Por su parte, el codirector Juan Luis Arsuaga se refirió a los hallazgos que los investigadores realizaron el yacimiento del portalón, que cuenta con una de las secuencias estatigráficas con "abundante" registro arqueológico y paleontológico más completas de la Península Ibérica para los últimos 4.000 años.

En la presente campaña, tras la excavación de los niveles correspondientes al, Pleistoceno superior, una época sin registro sedimentario confirmado en Atapuerca hasta la fecha, se han obtenido datos de mamíferos fósiles y paleopalinológicos.

Estos restos son, según indicó, "muy valiosos" para reconstruir las condiciones ambientales de la meseta castellana hace 30.000 años, cuando el clima era "durísimo".

En cuanto a la Sima de los Huesos, destacó que los investigadores encontraron este año un colmillo de oso, de unos 10 centímetros de longitud, y de hace unos 500.000 años.

En este yacimiento, y a una semana del final de la excavación en él, ya se han recuperado más de 160 fósiles humanos, entre los que destacó cuatro huesos del carpo y cuatro del metacarpo, correspondientes a la mano derecha de un mismo individuo.

Asimismo, valoró el descubrimiento de un nuevo cráneo humano muy completo. Un acontecimiento sin precedentes desde los descubrimientos del año 1992.

Por su parte, el codirector José María Bermúdez de Castro, valoró la importancia del nivel TD6 de Gran Dolina, en el que todavía queda mucho por excavar, según sus palabras, ante los últimos hallazgos en el nivel anterior, TD10, que obligaron a reorientar la programación en la anterior campaña.

Según señaló, los diez fósiles hallados este año aparecieron en una superficie de unos siete metros cuadrados que en la actualidad está en excavación.

"El año que viene seguiremos excavando esta área y esperamos que puedan aparecer más restos", declaró.

Bermúdez de Castro confió en que cuando todas las infraestructuras relacionadas con los yacimientos de Atapuerca, incluido el Museo de la Evolución Humana, estén concluidas, los investigadores puedan trabajar más tiempo en este yacimiento, en un periodo de unos tres ó cuatro meses de duración. Según sus cálculos, el TD6 podrá excavarse en extensión dentro de seis ó siete años.