Ser ladrón es cada día más sencillo.
Madrid, 13 de marzo de 2018.- El sucesivo aumento de los robos con violencia en domicilios se debe en muchos casos a cerraduras obsoletas. El gasto en seguridad por parte de los particulares se sigue incrementando en Cataluña en particular y en toda España en general.
La ropa desperdigada por el suelo, los cajones revueltos y muchos enseres rotos. Esto es lo primero que uno se encuentra cuando la cerradura de su hogar ha sido forzada. Además los ladrones se llevan no sólo el dinero en metálico, sino todo lo que vean de valor: cuberterías, joyas de familia o productos informáticos. Algunos de ellos con un valor muy superior al que el dinero pueda pagar, pues son productos insustituibles por el valor sentimental. Lo habitual es no recuperar nunca los enseres robados.
Existen otras medidas a tomar para intentar evitar un disgusto. Entre ellas:
-No esconder unas llaves de repuesto en sitios accesibles y previsibles, como debajo de un felpudo.
-Asegurarse de dejar siempre puertas y ventanas bien cerradas al salir del domicilio.
-Valorar la posibilidad de contratar una alarma sonora y actualizar cada cierto tiempo las contraseñas de este tipo de dispositivos.
-No publicar en redes sociales cuándo estará la vivienda desocupada (horarios, vacaciones, etc).
-Ocultar buena parte del dinero y de los objetos más valiosos en lugares rebuscados o en una caja de seguridad.
-No permitir que se acumule la correspondencia en el buzón cuando se está ausente. Solicitar a un familiar o vecino que se encargue de recogerla con periodicidad.
-Si es posible, que una persona de confianza mueva las persianas de vez en cuando en nuestra ausencia. De todas formas, cuando el hogar quede vacío, en zonas muy problemáticas será mejor dejar las persianas siempre bajadas.
-Estudiar la posibilidad de colocar rejas en las ventanas en pisos poco elevados.
En torno al 2010 se atribuía en aumento de los robos en hogares con el incremento de bandas organizadas de ladrones de origen extranjero, en especial en algunas poblaciones de Cataluña. Pero los cerrajeros en Barcelona y alrededores saben bien que el número de asaltos sigue al alza porque los ladrones, extranjeros o patrios, se ponen al día con los nuevos métodos de seguridad, lo que hace que las cerraduras que eran seguras hace una década hoy sean un objetivo fácil. La prevención de asaltos pasa por ser más rápidos que los delincuentes, contratando los últimos avances en cerrajería y sistemas antirrobo.Existen otras medidas a tomar para intentar evitar un disgusto. Entre ellas:
Muchas de estas medidas son de sentido común y suficientes para disuadir a los ladrones ocasionales, esto es, los que aprovechan una ventana abierta o la certeza de una casa vacía y sin vecinos a determinadas horas para intentar el robo en lo que es un objetivo fácil o¡donde tendrán amplio tiempo para rebuscar los objetos de valor.
Para hacer frente a los ladrones organizados, lo mejor es combinar lo de siempre, es decir, la cerrajería actualizada, con los sistemas de alarma. En chalets y viviendas de planta baja el enrejado y las alarmas son casi imprescindibles, pues son el objetivo de los ataques más violentos, en muchas ocasiones con los inquilinos dentro del hogar.
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Autor: Pedro Fernández
Empresa: OlimpoMarketing
