VALENCIA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Hospital General es "pionero en la implantación del láser verde-ktp en centros públicos" ya que en él se han tratado 65 pacientes con esta técnica y colabora en la formación de urólogos que están empezando con esta técnica en otros centros, según informaron hoy fuentes del centro en un comunicado.
Explicaron que el procedimiento por cirugía endoscópica con láser verde "garantiza una mínima agresión quirúrgica, corta permanencia de la sonda y una alta hospitalaria precoz". La fotovaporización prostática mediante láser verde-KTP es "una de las últimas novedades en el abordaje de la hiperplasia benigna de próstata (HBP)", precisaron.
En este sentido, indicaron que "este tratamiento permite eliminar mediante técnicas endourológicas el tejido prostático de forma incruenta, minimizando el sangrado intra y postoperatorio, hecho que suele aparecer en las cirugías convencionales".
La hiperplasia benigna de próstata afecta a uno de cada cuatro hombres de 50 años, a la mitad de varones mayores de 60 años y casi al 80-90 por ciento de los mayores de 80 años y la cirugía prostática es la segunda en frecuencia en el hombre. La reducción o eliminación del adenoma se ha llevado a cabo tradicionalmente mediante resección transuretral (RTU) y prostatectomía abierta, dependiendo de los casos.
En el servicio de urología del Hospital General de Valencia se han intervenido 65 pacientes en 2006 con un tiempo medio quirúrgico de 64 minutos. En la mayoría de los casos se usó una sola fibra por procedimiento, con una media de energía liberada de 175.000 Julios, para lo cual se utiliza un generador Green Liht PV con una potencia de 80W.
El médico del servicio de urología del Hospital General de Valencia, Emilio López Alcina, señaló que "en centros públicos españoles, en la Comunitat somos pioneros en la implantación de este tipo de procedimiento. Durante 2006 también hemos colaborado en la formación de los urólogos que están empezando a trabajar con esta técnica en otros centros" ya que según dijo, Sanidad pretende "implantar esta técnica en otros hospitales públicos mejorando la accesibilidad de los pacientes a las mismas".
Asimismo, indicó que este método de cirugía "mínimamente invasiva ofrece resultados a largo plazo que se mantienen sin necesidad de reintervenir o usar otro método complementario". "El procedimiento por cirugía endoscópica se realiza de forma segura bajo una excelente visión por la ausencia de sangrado, así que en todo momento estamos viendo lo que hacemos, evitando de esta manera el riesgo de perforación capsular o lesión del esfínter urinario, nula o mínima absorción del líquido de irrigación y un mejor postoperatorio", subrayó López Alcina.
"Al reducir la agresión quirúrgica, --agregó-- se facilita un corto tiempo de permanencia de la sonda menor de 24 horas, un alta hospitalaria precoz y una pronta reintegración socio-laboral del paciente".
TÉCNICA SEGURA
El láser verde o KTP --fosfato, titanio y potasio-- se aplica mediante una fibra insertada en un cistoscopio de doble corriente que a través de la uretra y mediante video-cámara permite alcanzar endoscópicamente la próstata y liberar un haz de luz con una longitud de onda de 532 nanómetros. Es de gran afinidad por el pigmento de la hemoglobina y que a gran potencia vaporiza la próstata, convirtiéndola en vapor de agua que se elimina por un sistema de riego continuo.
De esta manera, indicaron que "al mismo tiempo sella los vasos sanguíneos, hecho que prácticamente elimina la posibilidad de sangrado y permite que el paciente salga de la intervención con una sonda que se retira en un periodo mínimo".
Esta fuente de energía presenta como característica fundamentales una elevada afinidad por la oxihemoglobina y una baja afinidad por el medio de irrigación, lo cual se traduce en una muy escasa profundidad de penetración --alrededor de 1milímetro-- y un mínimo daño a los tejidos circundantes.
Este procedimiento, "por su seguridad", es "apropiado para pacientes considerados de alto riesgo con insuficiencia cardiaca, anticoagulados o pacientes con anemia crónica --tales como ancianos--, ya que prácticamente se elimina el sangrado". Por ello, destacaron que es una técnica podría ser considerada de elección para pacientes con elevado riesgo quirúrgico anestésico, o en tratamiento con antiagregantes o anticoagulantes.
En los pacientes operados en el Hospital General de Valencia "no se ha registrado incidencia alguna de disfunción eréctil postoperatoria en pacientes que previamente fueran potentes, esto se puede explicar por el mínimo daño al tejido circundante que produce la vaporización fotoselectiva", apuntaron.
