ALICANTE, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las conselleries de Medio Ambiente y de Agricultura están realizando acciones para informar a los usuarios de embarcaciones que navegan por la reserva natural alicantina del Cabo de San Antonio para prevenir daños medioambientales en este espacio protegido integrado en el Parque Natural del Montgó para prevenir que los barcos dañen los fondos marinos.
El conseller de Medio Ambiente, José Ramón García Antón, señaló hoy que los buceadores sin permiso copan la mayoría de infracciones detectadas por la vigilancia de la Reserva Natural Marina del Cabo de San Antonio. La segunda causa de incidencia sobre esta reserva natural alicantina es el fondeo de embarcaciones, "una práctica que causa un gran impacto sobre la pradera de posidonia oceánica de los fondos marinos de la zona", precisó.
El movimiento de los elementos de anclaje producidos por el viento y las estructuras de las embarcaciones, así como las pinturas de las anclas actúan también como elementos que degradan el medio
No obstante, según el titular de Medio Ambiente, "las praderas de posidonia de la Reserva Natural del Cabo de San Antonio presentan un excelente estado de conservación". La posidonia oceánica es una planta marina endémica del Mediterráneo que conformn un ecosistema muy importante, por lo que asegurar su conservación se incluyó como hábitat prioritario en la directiva de hábitats.
La posidonia se considera uno de los ecosistemas más productivos del Mediterráneo porque mantiene el equilibrio sedimentario con el litoral protegiéndolo de la erosión, además de ser una fuente de oxigenación y un hábitat del que viven más de 400 especies de plantas y más de 1.000 especies de fauna.
García Antón que el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del Parque Natural del Montgó regula los usos que puedan causar impactos ambientales sobre la flora y la fauna de la Reserva Natural del Cabo de San Antonio, en especial, sobre las praderas de posidonia y las cuevas sumergidas.
García Antón explicó que su departamento se encarga de gestionar y vigilar la Reserva Natural del Cabo de San Antonio, mientras que la Reserva Marina de Pesca es competencia de la Conselleria de Agricultura. De hecho, cada una de las conselleries cuenta con un vigilante que se encarga de informar a los tripulantes de las embarcaciones que navegan por el Cabo de San Antonio sobre los usos restringidos y prohibidos.
El vigilante de la Conselleria de Medio Ambiente contabiliza los fondeos que se producen, la velocidad de las embarcaciones, las restricciones para la navegación de las motos acuáticas, la pesca profesional y de recreo, el buceo con escafandra, la recogida de residuos sólidos y la observación de vertidos líquidos al mar.
Asimismo, el vigilante colabora en la elaboración de muestreos científicos como el del Illot de la Mona para el seguimiento de las especies vegetales 'Silene ifacensis' y 'Medicago citrina', el seguimiento del cormorán moñudo y de los nidos de halcón peregrino y el seguimiento de la pradera de posidonia oceánica.
