MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, aseguró hoy que "no ha habido ninguna tensión" entre el Gobierno y las autoridades valencianas respecto a la organización de la America's Cup, aunque manifestó su sorpresa por que a "otras administraciones" les "pueda molestar" que el Ejecutivo intente promocionar este evento deportivo. El ministro hizo estas declaraciones a la salida de la presentación en Madrid de la Copa de la América, presidida por los Reyes.
Precisamente, el pasado día 5, el portavoz del Consell valenciano, el 'popular' Esteban González Pons --que hoy asistió a la celebración en el Ministerio de Fomento-- manifestó que la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia se plantearían organizar conjuntamente un acto en Madrid, sin contar con el Gobierno estatal, sobre la America's Cup y con la presencia del Rey, si el Ejecutivo central no contaba con ellos para coorganizar la presentación del evento de hoy.
"Me sorprende que la promoción de la Administración General del Estado de la Copa de la América y su celebración en Valencia pueda molestar a otras administraciones, las cuales han participado en su promoción y celebración en Valencia, París o Estados Unidos y no han comunicado, ni han informado ni han invitado a la Administración General del Estado", manifestó Sevilla.
QUE NO SE MOLESTEN.
En este sentido, Sevilla recordó que las administraciones decidieron trabajar conjuntamente en las obras del puerto de Valencia y en lo que van a ser los usos posteriores del puerto a través del consorcio, donde, dijo, "estamos las tres administraciones: la General del Estado, con un 50 por ciento, el Ayuntamiento de Valencia, con un 25 por ciento, y la Generalitat, con otro 25 por ciento".
"Y --añadió-- decidimos también que lo que era la promoción del acontecimiento lo haríamos cada una de las administraciones por nuestra cuenta coordinadamente". De hecho, Sevilla comentó que cada una de de ellas ha nombrado un comisionado para que se encargue de la misma. Por todo ello, confió en que "cada vez que la Administración General del Estado cumple con su función", las otras "no se molesten".
Al acto de hoy, que estuvo presidido por Sus Majestades, don Juan Carlos y doña Sofía, asistieron también el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, los ministros de Fomento y Educación, Magdalena Álvarez y Mercedes Cabrera, respectivamente, el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, y la alcadesa de Valencia, Rita Barberá.
PROYECCIÓN INTERNACIONAL.
Al margen de esta polémica, el presidente de la Generalitat Valenciana comparó el acto de hoy en Madrid con una "prerregata", pero de "proyección internacional". A su juicio, la celebración en Valencia de la Copa América es "la apuesta política, social y económica" más rentable de la comunidad valenciana.
Es más, el jefe del Ejecutivo valenciano enfatizó que esta década en España "estará marcada sin duda por la Copa América 2007 en Valencia". "España vive allí el evento deportivo más importante de esta década, tiene el mejor escaparate de país que funciona --resaltó Camps--. Hoy la Comunidad Valenciana más que nunca es la España que lidera, la de la prosperidad y la ambición".
De su parte, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, agradeció de manera especial al Rey su apoyo, que "siempre manifiesta y que es un ejemplo". A su juicio, a Valencia le faltaba la "percha" de la Copa América para su "reconocimiento mundial", esto es, hacer de la ciudad el primer puerto turístico del Mediterráneo. La instalación deportiva, pronosticó, "hará de Valencia el primer y mejor destino turístico" de este entorno.
