VALENCIA, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia ha incorporado un nuevo sistema de hemodiálisis que permite realizar el proceso sustitución de la función renal de forma ininterrumpida, según informó hoy la Generalitat en un comunicado.
El primer caso que el hospital abordó con esta tecnología fue el de un paciente con gripe A H1N1 que ingresó como consecuencia de un shock séptico y que desarrolló un fallo multiorgánico y un fracaso renal agudo.
La ventaja de este nuevo sistema frente a la técnica de diálisis convencional, que se realiza de forma intermitente, es que permite una depuración de la sangre "menos agresiva y desestabilizante del equilibrio global del paciente", así como un "mejor mantenimiento" de la presión arterial.
Además, este nuevo sistema también permite realizar tanto técnicas de mayor complejidad, como la sustitución total del plasma de la sangre en pacientes con anticuerpos que provocan enfermedades inmunológicas, como tratar determinadas intoxicaciones con riesgo vital para el paciente.
"La incorporación de este sistema de hemodiálisis supone un gran paso para el tratamiento y el manejo de pacientes con fallo renal agudo y en disfunción multiorgánica", según explicó el jefe del servicio de Medicina Intensiva, Manuel Cervera.
Entre las principales indicaciones de este método de sustitución artificial de la función renal se encuentran la insuficiencia renal de cualquier etiología, así como los trastornos metabólicos no controlables por medios convencionales (retención de líquidos), los trastornos hidroelectrolíticos severos, las hipotermias y las hipertemias.
No obstante, la hemodiálisis contínua también es aplicable en los casos de infecciones graves o en los síndromes de respuesta inflamatoria sistémica que comprometen la función de otros órganos, cuyo tratamiento pasa por liberar al organismo de sustancias y productos biológicos o tóxicos, según explicó la misma fuente.
Asimismo, esta técnica también se aplica en el tratamiento de las intoxicaciones graves por sustancias susceptibles de ser dializadas, como las intoxicaciones por litio, frecuentes en pacientes con trastorno bipolar.
