El borrador de la Ley Valenciana de Cambio Climático plantea reservas suelo para instalaciones de energías renovables

La consellera Mireia Mollà durante la presentación del borrador de la Ley Valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica
La consellera Mireia Mollà durante la presentación del borrador de la Ley Valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica - GVA
Actualizado: martes, 26 mayo 2020 15:52

Crea un impuesto a nuevas matriculaciones de vehículos combustibles y propone lo mismo en buques y zonas de gran concentración de vehículos

Crea un impuesto a nuevas matriculaciones de vehículos combustibles y propone lo mismo en buques y zonas de gran concentración de vehículos

   VALÈNCIA, 26 (EUROPA PRESS)

   El borrador de la 'Ley Valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica' plantea que los nuevos Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) tendrán que reservar un área de suelo a la generación de energías renovables para dotar de "autosuficiencia energética" el proyecto de desarrollo urbanístico concreto.

   Así lo ha avanzado este martes la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, durante la presentación del texto, acompañada de la secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Paula Tuzón; la directora general de Cambio Climático, Celsa Monrós, y el director general de Transición Ecológica, Antonio García Díez.

   Durante su exposición, Mollà ha apelado a la "corresponsabilidad" de los municipios para poder incluir estas reservas en PGOU que estén en tramitación, a pesar de no estar la norma aún no está en vigor y por tanto no les afectaría. "No podemos hacer como que no pasa nada", ha advertido, "y si no incorporan la autosuficiencia en sus planes después dependerán de que haya espacio en otros lugares".

   Precisamente, el borrador incluye de hecho un mapa de la Comunitat que marca en rojo las zonas en las que por sus condiciones no se podrán ubicar instalaciones de energías renovables, en naranja donde está complicado y en gris los terrenos más adecuados, donde se favorecerá su construcción.

   La Valenciana es así la primera CCAA que regula la participación local en instalaciones de generación renovable, de modo que si se acredita un mínimo de la participación de ámbito local --ya sea de ámbito publico o privado-- el proyecto adquirirá "carácter prioritario".

APUESTA POR LA 'FISCALIDAD VERDE'

   La futura norma apuesta también por la 'fiscalidad verde' con el desarrollo de un impuesto sobre las nuevas matriculaciones de vehículos combustibles que se realicen a partir de 2023, una medida con la que pretende incentivar el uso de vehículos libres de emisiones. Y dado que esto exigirá una red suficiente de puntos de recarga, el impuesto tendrá "carácter finalista" y lo que se recaude se destinará a medidas en este sentido, ha explicado la consellera.

   Además, el borrador propone establecer una carga impositiva para zonas de gran afluencia de vehículos combustibles como son los centros comerciales y para los grandes buques que recalen en los puertos valencianos.

   En esta misma línea y con vistas a favorecer la "movilidad sostenible", la futura normativa --que todavía debe pasar por Les Corts para su aprobación-- prevé obligar tanto a administraciones públicas como a empresas privadas a sustituir su flota de vehículos por otra libre de emisiones.

   Estas son algunas de las medidas que contempla el borrador de la 'Ley Valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica', cuya presentación estaba prevista en marzo pero se ha visto aplazada hasta ahora como consecuencia de situación generada por la Covid-19.

   La consellera ha establecido una serie de "analogías" entre la presentación de este borrador y la crisis sanitaria: la importancia de la ciencia frente a la pandemia y al cambio climático, la necesidad de colaboración entre instituciones ante dos problemas que no entienden de fronteras y la necesidad de "reaccionar a tiempo" antes de tener que "paliar sus efectos".

   En este punto ha recordado que la Comunitat Valenciana es una de las zonas "más vulnerables" a los efectos del cambio climático y sin embargo, hasta la fecha no solo va camino de reducir sus emisiones hacia un modelo "neutro" sino que va "en dirección contraria".

   Esta nueva normativa pretende dar un "salto cualitativo" con medidas "valientes" que impliquen a los sectores económicos y a la sociedad civil organizada, con elementos que evalúen sus resultados y a su vez proporcionar "seguridad jurídica", ha subrayado Mollà. Y se centra en tres grandes ámbitos: energía, movilidad y ordenación del territorio.

OBJETIVOS ENERGÉTICOS DE LA COMUNITAT

   En estos momentos la Comunitat Valenciana no tiene dependencia del carbón pero sí tiene una gran dependencia de combustibles fósiles --36% en petróleo y un 28% en gas natural, que suman un 64%-- y de energía nuclear (22%).

   Frente a estas cifras, la norma se marca como objetivo para 2030 reducir las emisiones totales un 40% respecto a 1990, lo que supone dejar de emitir unas 13,5 millones de toneladas de CO2, más de la mitad de las toneladas emitidas en 2017.

   Para ello planea un "ambicioso" abastecimiento en energía solar: 6.000 MW en 2030, el equivalente a 12.000 hectáreas. En esta línea, recoge que los nuevos aparcamientos en superficie o en cubiertas de titularidad privada de más de 1.000 metros cuadrados (la media de los que hay en los centros comerciales es de 1.500 m2) se tendrán que cubrir con placas solares equivalentes a la energía que necesita la instalación asociada, como por ejemplo de un centro comercial.

   Asimismo, se aliena con los objetivos de "neutralidad" en 2050 como la Unión Europea está pidiendo. En este momento, ha insistido, "vamos en dirección contraria". En España las emisiones aumentan un 18% en la Comunitat un 42%. "Es insostenible", ha alertado.

   En cuanto a eficiencia, se marca como objetivo una reducción del 35% en el consumo primario registrado tomando como base el 2007, una meta para la que la Comunitat ya está a medio camino, pues ha bajado un 15%.

   Por lo que respecta a la producción, su intención es generar al menos el 70% de la energía eléctrica en 2030 y en consumo plantea que la energía final consumida de todas las fuentes energéticas en 2030 baje un 42%.

Leer más acerca de: