Cayo Lara afirma que Coca-Cola "tendría que poner en sus botes el nombre de las personas que va a despedir"

Coca Cola
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 31 enero 2014 13:50

VALENCIA, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

El coordinador de IU, Cayo Lara, ha afirmado este viernes que Coca-Cola "tendría que poner en los bote el nombre de cada uno de los trabajadores que va a echar a la calle" para que los ciudadanos "cuando viéramos el bote y pusiera Pepe, María o Juan nos encontraríamos con la gente que está echando a la calle una empresa que tiene beneficios".

Lara, que tiene previsto esta tarde mantener una reunión con el Comité de Empresa de Coca-Cola en Quart de Poblet, ha recalcado que "no entienden" que una empresa que tienen beneficios pueda despedir a trabajadores.

Por eso, ha recordado que IU ha presentado una proposición no de ley, que ya ha sido admitida por el Congreso y que quieren que comience ya el debate, para impedir que las empresas con beneficios puedan despedir trabajadores.

Para ello, la iniciativa parlamentaria incluye, entre otros, un punto que establece "tipificar como un delito de desobediencia civil el incumplimiento por parte del empresario de los derechos del trabajador en el caso de despidos sin causa justificada". Así, plantea "una serie de reformas" a la reforma laboral del Gobierno con el fin último de "impedir que una empresa con beneficios pueda despedir a trabajadores".

Lara ha señalado que esto es lo que está ocurriendo con Coca-Cola, pero que "desgraciadamente se repite la historia" de España con varias empresas que han hecho Expedientes de Regulación de Empleo (ERES) aprovechando la nueva reforma laboral que permite el despido a las empresas que tengan tres trimestre de pérdidas de ventas aunque tengan beneficios con 20 días de despido. "Esto hay que acabar con ello", ha subrayado.

De hecho, ha garantizado que cuando cambien la correlación de fuerzas en Parlamento "se va a acabar con la reforma laboral del PP y también con la que hizo el PSOE" porque "son reformas que van contra los trabajadores y contra el sentido común de unas relaciones laborales" que deben ser "más justas".