ALICANTE, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Infraestructuras y Transporte, Mario Flores, ha acudido este sábado a la inauguración del nuevo vial de conexión del casco urbano de Orihuela con la carretera de la A-7 en el que la Conselleria ha invertido un total de 10,5 millones de euros, según han informado fuentes de la Generalitat a través de un comunicado.
Mario Flores, durante el acto, ha destacado que Orihuela "tiene ya una conexión óptima con la A-7, con las mejores condiciones de seguridad vial y de eficacia" y ha asegurado que, con este acceso, la localidad queda a sólo tres minutos de la autopista".
"Se trata de una nueva carretera de 3,383 metros de trazado que cuenta con cinco rotondas para favorecer la accesibilidad y para ordenar, con los mayores niveles de seguridad y eficacia, las intersecciones", ha explicado Flores. Asimismo, ha destacado que esta obra sustituye a uno de los trazados "con mayor riesgo de accidentes de la Comunitat".
También ha señalado que, por la alta ocupación que tiene el trayecto Orihuela-Autopista, unos 16.000 vehículos diarios, se calcula un plazo de amortización de 18 meses.
El conseller ha destacado, además, la "sensibilidad ambiental" del proyecto, ya que ha incorporado el tratamiento vegetal de los taludes y el ajardinamiento de las glorietas y otros elementos. La instalación de elementos de seguridad --como cámaras para el control de tráfico, barreras de protección para motoristas o elementos para la medición del tráfico-- ha sido otro de los puntos destacados por el conseller.
El titular de Infraestructuras también ha subrayado que "el nuevo enlace mejorará los tiempos de recorrido con las poblaciones próximas, potenciando las condiciones industriales y urbanísticas de todo el entorno".
El anterior acceso a Orihuela desde la A-7 se efectuaba principalmente a través de la CV-870, que presentaba problemas importantes de congestión. El nuevo vial "va a absorber los 16.000 vehículos que circulan de media entre Orihuela y la autopista con mejores condiciones de fluidez", ha dicho Flores.
CINCO ROTONDAS
A lo largo de la carretera se disponen cinco glorietas. Las dos primeras, ubicadas en el enlace con la A-7, permiten la conexión con la CV-870. La dos siguientes dan acceso a la CV-870 y a la futura área industrial prevista en el entorno. La quinta rotonda conecta con la N-340 y con la ronda de Orihuela. Mientras, el tramo de la anterior carretera queda libre para su uso como vía de servicio y el acceso a las propiedades y a la CV-868.
Para llevar a cabo la obra, ha sido necesario también incorporar cuatro estructuras para salvar los distintos enlaces y la Rambla de Abanilla sobre la que se ha construido un viaducto de 84 metros de longitud. En total, junto a las rotondas y ramales, la actuación alcanza los diez kilómetros.
Flores se ha referido también al 'Plan Confianza', por el que la Generalitat va a invertir un total de 2.520 millones de euros en la Comunitat Valenciana y 76 en la comarca alicantina de la Vega Baja. "Mientras el Gobierno central paraliza contratos de obras, la Generalitat incrementa su esfuerzo inversor para mantener sus compromisos", ha subrayado el titular de Infraestructuras.
