Cultura.- Los niños cuestionan hoy en el VEO el papel de los adultos en su educación en 'That night follows day'

Actualizado: sábado, 20 febrero 2010 8:00

VALENCIA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Festival VEO, organizado por el Ayuntamiento de Valencia a través de la Fundación VEO, reúne este fin de semana en el Teatre El Musical a un coro de 16 niños que, con "humor y provocación", analizan los sistemas de crianza y disciplina de la sociedad actual. 'That night follows day' viene firmada por el dramaturgo inglés Tim Etchells y es un proyecto del centro de arte belga CAMPO, un semillero de nuevas tendencias, según informó la organización en un comunicado.

En escena, un grupo de 16 menores de entre los 8 y los 14 años se alinean delante del gimnasio de una escuela y desvelan sus preocupaciones, inquietudes y carencias mirando a los ojos del público. Esta obra para adultos interpretada por niños supone "una llamada de atención enunciada por el rupturista dramaturgo inglés Tim Etchells".

"Los adultos tienen un gran poder en el mundo de los niños. Establecen el marco, imponen las reglas, determinan qué es posible y qué imposible", explica el autor, que añade que le interesaba "trazar las vías a través de las cuales los mayores influyen o construyen ese universo, no solamente los padres, sino el entramado de profesores, medios de comunicación, familia y vecinos. Todos, unidos o en conflicto, crean de manera colectiva un sistema llamado infancia".

Tim Etchells ejerce desde 1984 la dirección artística de la prestigiosa compañía Forced Entertainment. La obra con la que visita el Festival VEO, 'That night follows day', enlaza con varios proyectos desarrollados con su grupo, especialmente Speak bitterness y First Night, en las que los actores se dirigen directamente a la audiencia para enumerar catálogos de declaraciones.

"Algo en lo que insisto mucho a los actores es que deben dejar que aquello que dicen se convierta en el problema de la audiencia. Esto significa que han de fijar sus ojos en el público cuando hablan y no deben retirar la mirada al terminar, esperando una reacción. Resulta algo polémico, y en cierto modo, también es una página en blanco, una forma de dejar las frases suspendidas en una habitación llena de extraños y esperar a ver qué sucede", subraya.

Por ello, sostiene que si el público "se marcha cuestionándose su infancia, sus relaciones actuales con los niños en su papel de padres o cuidadores, maestros y vecinos, para mí es un buen resultado".

Para lograr en los niños la "fuerza y la templanza" que se observa en el resultado final del montaje, se trabajó mucho la interpretación en una serie de talleres en el centro de arte de la ciudad belga de Gant CAMPO, que también nutrieron el inventario de temas de la obra.

"Empecé a reflexionar sobre qué significa para un grupo de niños actuar para una audiencia de adultos. Todo lo que rodea las presentaciones infantiles (reuniones escolares, coros, fotografías escolares). En muchos casos parece que coincide el deseo de hacerlos parecer idénticos", destaca Etchells.

Así, en una recreación de los recuerdos de infancia del dramaturgo, el reparto interpreta retazos del texto al unísono. "Me interesaba esa tentativa de uniformidad, esa sensación de los niños disciplinados y en actitud de buena conducta. En muchos sentidos, en esto reside cómo los adultos quieren modelar a los niños", señala.

Tanto en sus montajes teatrales y ensayos literarios, como en sus colaboraciones con fotógrafos, escultores y videoartistas, Tim Etchells siente una inclinación por las experiencias en vivo. "La actualidad es un punto al que regreso constantemente. Me interesa lo que está sucediendo aquí y ahora. Las situaciones reales son el espacio en el que la interpretación coincide con la audiencia", reconoce.