Cultura.-El ocaso de un futbolista metido a guardaespaldas, eje de una novela estudiada por la Universidad de California

Actualizado: lunes, 6 octubre 2008 21:04

SEVILLA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

El escritor alicantino Gastón Segura, finalista de los premios de narrativa Azorín y Blasco Ibáñez, es el autor de 'Stopper' (Berenice, sello de Almuzara), una novela negra que el departamento de Lenguas Modernas de la Universidad de California ha elegido como "texto de referencia" en el que se narra el ocaso de un futbolista al que las circunstancias llevan desde el posible estrellato al fracaso, y de ahí a ejercer de guardaespaldas de un mafioso de la construcción.

En declaraciones a Europa Press, su autor se refirió a la historia de su protagonista como "la pulsión de una desilusión, la propia de alguien que no espera ya demasiadas cosas de la vida". Envuelto en un "tórrido" conflicto que tiene como escenario la Madrid del cambio de siglo, Julián se compromete a la liberación del marido de una mujer "peligrosa", Lidia, la 'femme fatale' de esta novela que reúne casi la totalidad de los ingredientes clásicos del género negro.

"Para que estén todos los elementos falta el asesinato", según reseñó Gastón Segura, quien añadió por el contrario que "hay palizas, suspense, una mujer peligrosa y dinero, mucho dinero de por medio".

Sobre la estructura, que se caracteriza por la utilización de la primera persona y por la "agilidad" que le confiere el hecho de no fragmentarse en capítulos, el escritor apuntó que "'Stopper' carece de una trama de misterio", de manera que "el lector se ve arrastrado desde la primera línea por la conciencia del protagonista, que se bambolea en un recorrido que abarca desde La Moraleja hasta Lavapiés, pasando por algunas de las nuevas urbanizaciones de Madrid".

En este sentido, consideró que el modelo de novela negra de autores como Chandler o Hammett se encuentra ya "en desuso" porque en esa estructura el lector intenta averiguar qué posibilidades tienen los distintos personajes de ser el malo. Por ello, sostuvo que se está buscando otro modelo ya que, según defendió, el interés de la novela negra radica en realidad "en lo que tiene de denuncia", es decir, "en su implícita voluntad de compromiso" para poner de manifiesto ante el lector la podredumbre y las injusticias de la sociedad a través de las pesquisas del protagonista.

Respecto al protagonismo que tiene en la trama el mundo del fútbol, Gastón Segura recordó que la presencia del deporte es un recurso "habitual" de la novela negra, si bien consideró que ha sido siempre el boxeo el deporte "predilecto" en el género. No obstante, como esta disciplina tiene ya "escasa presencia" en España, señaló que contempló el mundo de los toros y el del fútbol para contextualizar la acción, decidiéndose por éste úlitmo porque, a su juicio, el primero presenta para el lector "mayores dificultades" en el argot.

"Del mundo de los toros hay aspectos que no conozco del todo bien, como la vida del novillero, que es bastante truculenta", reconoció el autor, conocedor sin embargo del universo futbolístico "en los años 80", cuando estudió la carrera en Valencia, de ahí que eligiera al equipo de esta ciudad para que Julián, el protagonista de 'Stopper', iniciara una prometedora trayectoria que luego se truncaría.

"A mi modo de ver, un escritor tiene que saberlo todo de su protagonista, aunque al final sólo hable en la novela de un 30 por ciento, porque con ese 70 por ciento restante consigue que tenga entidad y no quede como un personaje de cartón piedra", resaltó.

Con todo, Gastón Segura aclaró en este punto que la historia no está basada en hechos reales y que los personajes pertenecen, por lo tanto, al mundo de la ficción, lo que no es óbice para que los mismos, "como es habitual en cualquier novela", sean el resultado de "la suma de retazos de personas reales". Así, aseguró que la estructrura no la tuvo clara hasta que se le "apareció" el personaje de Lidia, la 'femme fatale', una mujer "esbelta y de cabello oscuro" a la que definió como "una persona baqueteada por la vida".

Narrada en una "original" primera persona porque ésta se corresponde con la conciencia y no con la voz de su protagonista, el escritor explicó que el relato se configura como "una sola tira de texto que, no obstante, podría haberse alargado mucho más", una posibilidad que sin embargo declinó el autor pensando en que el lector "no se empachara" con este estilo.

Gastón Segura (Villena, Alicante) nació en 1961 y se crió en Caudete (Albacete). Licenciado en Filosofía por la Universidad de Valencia, se instaló en 1990 en Madrid para dedicarse a la escritura, pero la necesidad de mantenerse lo llevó primero a trabajar en Ediciones Clásicas y después a fundar un taller de publicidad hasta que se consagró exclusivamente a la escritura en 1996.

Finalista de los premios de novela Azorín (1999) y Blasco Ibáñez (2003), es el autor de 'El revoltoso: divertimento zarzuelesco en dos actos' (1991), junto al músico Javier Krahe, y de 'Retratos a dos voces (2002)', con Carlos Tena. En 2004 publicó 'A la sombra de Franco' (Ediciones B) y en 2006 'Ifni: la guerra que silenció Franco' (Martínez Roca).