VALENCIA, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El descenso en el uso de los efectos de comercio en los nueve primeros meses de 2009 revela que la actividad económica retrocedió un 33 por ciento en ese periodo, según un estudio realizado por Corfisa Financial con los datos sobre letras de cambio, pagarés y otros documentos de giro, que son "una de las más importantes modalidades de pago entre empresas y suponen una manera de detectar la actividad económica de un país".
En concreto, la Comunitat Valenciana registró una caída en el uso de los efectos de comercio del 36,96 por ciento en los nueve primeros meses del año respecto a las cifras del ejercicio anterior.
El análisis de los datos sobre el importe de los pagos entre 2002 y 2009 señala que el importe de pagos realizados en 2008 con efectos de comercio alcanzó los 389.875 millones de euros, lo que representa el 36 por ciento del PIB del ejercicio, mientras que, durante los nueve primeros meses de 2009, esta cifra cayó un 33 por ciento, "un descenso de la actividad económica sin precedentes en este tipo de pago", señalan los responsables del estudio.
En términos del PIB, el porcentaje que representa el volumen de efectos de comercio bajó hasta el 25,80 por ciento en los primeros nueve meses de 2009, lo que supone un retroceso por encima del 10 por ciento respecto al año anterior y un 13 por ciento menos que en el año 2007.
Además, las empresas descuentan en torno al 80 por ciento del volumen de efectos de comercio del sistema bancario como medio de financiación de su capital circulante, cifra que pasó de 248.374 millones de euros en los nueve primeros meses de 2008 a 158.496 millones para el mismo periodo de 2009, lo que supone una caída de más del 36 por ciento.
El informe señala asimismo que el descenso en el volumen de efectos comerciales, tanto el vencido como el financiado, se retrotrajo al volumen de 2002, lo que supone "una reducción de la actividad hasta los niveles de hace más de siete años", resaltaron las mismas fuentes.
De hecho, destacaron que "el volumen de efectos comerciales vencidos del periodo enero-septiembre de 2009 es incluso inferior en un 3,5 por ciento al registrado en el mismo periodo de 2002".
Hasta el año 2008, el incremento del volumen de pagos fue del 5 por ciento de media, con tasas de crecimiento de hasta el 10 por ciento en 2005 y 2007, mientras que en 2008 se produjo un descenso de cerca del 5 por ciento que "un año después, está siendo ampliamente superado".
El consejero delegado de Corfisa Financial, Javier Rodríguez, señaló que "el descuento comercial es una herramienta de financiación, sobre todo, de las pymes que les permite recibir el pago de sus facturas, aunque éstas tengan vencimientos aplazados", de modo que su análisis resulta "esclarecedor", ya que "un descenso de su uso, implica directamente una caída de la actividad económica".
Así, subrayó que "los datos de los efectos descontados por el sistema bancario en los nueve primeros meses del año reflejan una conclusiones muy negativas", puesto que la caída registrada "implica que muchas pymes con importante facturación no han podido negociar sus pagos aplazados".
Rodríguez precisó que las empresas que requieren sus servicios "son cada vez de mayor tamaño, como consecuencia de una financiación insuficiente por parte de sus entidades habituales".
"BRUSCA CAÍDA" SUPERIOR AL 40%
Por comunidades autónomas, entre los "notables" descensos experimentados por todas las regiones, el informe destaca la "brusca caída" de la actividad en Andalucía, Canarias y Extremadura, donde el volumen de efectos de comercio se redujo en más del 40 por ciento, respecto a los primeros nueve meses de 2008.
Por el contrario, la caída más suave correspondió a Galicia, Cataluña, Baleares y Navarra, con descensos entre el 28,36 por ciento de Galicia y el 29,31 de Navarra, mientras que la Comunitat se situó cerca de la media, con una caída del 36,96 por ciento.
