VALENCIA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consejero de EUPV en Radio Televisión Valenciana (RTVV), Amadeu Sanchis, anunció hoy que pedirá explicaciones y la destitución del jefe de informativos de Canal 9, tras el reportaje que emitió anoche el programa 'Dossiers' de la cadena pública sobre El Cabanyal ya que, en opinión de Sanchis, ofreció una imagen del barrio valenciano "burda, manipulada, partidista y flagrantemente antidemocrática".
El dirigente de EUPV destacó en un comunicado que este reportaje supone "una burla a las recomendaciones que aparecen en el informe del Síndic de Greuges, en el que se instaba a la necesidad de garantizar la pluralidad y la objetividad y de modificar la línea informativa de Canal 9".
A juicio de Amadeu Sanchis, el reportaje emitido anoche "echa por tierra estas recomendaciones y vuelve a ignorar lo que es una televisión pública y el servicio público que debe cubrir, tal y como marca la Ley de Creación de RTVV".
Asimismo, tildó de "insostenible" la producción de un reportaje en el que "no se entrevistó a ningún representante de las posiciones favorables a la rehabilitación sin destrucción de El Cabanyal, no solo desde el punto de vista político, sino también desde el científico o el social", criticó.
Para Sanchis, el hecho que no apareciera ningún representante de las "numerosas instituciones", como las universidades valencianas o el Consell Valencià de Cultura, que "siempre se han manifestado a favor del mantenimiento de El Cabanyal como Bien de Interés Cultural (BIC) es un hecho sin precedentes en lo que debería ser una televisión democrática".
Del mismo modo, incidió en que la emisión ayer del especial 'Dossiers' sobre El Cabanyal "es la prueba evidente de que el PP sabe que sus recientes actuaciones en torno a la aprobación del decreto-ley son contrarias a la Constitución y, por lo tanto, al Estado de Derecho".
"Ahora entendemos que la supuesta aceptación por parte de la mayoría del Consejo de Administración de RTVV del informo del Sindic de Greuges no era más que un papel mojado sin ningún tipo de realidad", lamentó Sanchis, quien explicó que esta aceptación "se hizo de forma apresurada para evitar una debate real y sereno que mejorara la programación de la televisión pública".
