VALNCIA, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
Fundación Oceanogrfic y la Generalitat Valenciana han colaborado en la campaña 'Esta tortuga vive en el Mediterráneo', una iniciativa que surge a raíz del hallazgo el pasado mes de julio de una tortuga 'caretta caretta' en una playa de Castellón, que se encontraba desovando, y consiste en un protocolo para que la ciudadanía sepa qué hacer si encuentra algún ejemplar de estos animales en las playas, según ha informado la fundación en un comunicado.
La "alerta tortuga" por hallazgo de nidos se ha activado solo cinco veces en los últimos dos siglos. Al respecto, el responsable del Servicio de Vida Silvestre de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Juan Jiménez, ha destacado que "se está produciendo un curioso fenómeno de colonización de las tortugas, posiblemente asociado al cambio climático".
Jiménez ha indicado que las tortugas salen a desovar a altas horas de la noche, para evitar encuentros con depredadores, por lo que "no hay manera de predecir dónde van a aparecer". "Lo mejor es que la ciudadanía conozca que esto ocurre, y, en cuanto vea una tortuga salir por la noche andando en una playa en época de verano, sepa que esa tortuga sin duda va a poner huevos", ha añadido.
Asimismo, el responsable ha considerado que la concienciación y la colaboración ciudadanas "son fundamentales" y ha explicado que "es importante que la gente sepa qué hacer cuando ve una tortuga herida, muerta, varada o cuando la captura accidentalmente".
Por su parte, la directora de Comunicación de la Fundación Oceanogrfic, Elena Belenguer, ha asegurado que el punto de partida es "el desconocimiento de la vida marina en las costas valencianas", puesto que en las sueltas de tortugas, "niños y adultos preguntan si las tortugas vienen del Caribe y qué hacen aquí", ha lamentado.
"Las tortugas viven en el Mediterráneo y es raro que las veamos cerca de la costa, pero si las vemos en la playa, no se alejan y dejan que nos acerquemos a ellas, es posible que les pase algo", ha advertido Belenguer, y ha indicado que, en este caso, se debe llamar al 112 de inmediato para activar la Red de Varamientos.
Las acciones que se llevan a cabo tras el aviso dependen de una serie de circunstancias. Puede tratarse, por ejemplo, de una captura accidental o del hallazgo de una hembra de tortuga que va a poner un nido, con lo que para cada caso existe un protocolo concreto.
LLAMADA A EMERGENCIAS
En general, la llamada a Emergencias genera un aviso de la Sala del 112 a la Universitat de Valncia, que es la encargada de comunicar al Oceanogrfic el paradero de la tortuga, siempre que el animal esté vivo. Tras esa llamada, personal técnico de la Fundación Oceanogrfic, con el apoyo de la Conselleria de Agricultura, se desplaza hasta el lugar y traslada al animal al Área de Recuperación y Conservación de Animales del Mar, la llamada Arca del Mar del centro valenciano.
Una vez en el arca, las tortugas son sometidas a una serie de pruebas radiológicas, ecográficas, analíticas y sanguíneas, entre otras, para determinar posibles lesiones o patologías.
"Es frecuente encontrar síntomas de embolia gaseosa, es decir, partículas de nitrógeno en sangre, por pesca accidental", ha informado Belenguer. En esos casos, el Oceanogrfic dispone de una cámara hiperbárica para disolver el gas acumulado en el flujo sanguíneo.
RESIDUOS PLÁSTICOS Y CONTAMINACIÓN
Desde el centro marino han alertado de las consecuencias sobre la fauna de la contaminación de los océanos. Belenguer ha lamentado que "todas las tortugas que entran en el área de recuperación y conservación del Oceanogrfic tienen microplásticos en las heces" y ha considerado "alarmantes" los efectos que ello puede tener también sobre las personas, ya que también "forman parte de la red trófica".
Los efectos de los residuos plásticos se combinan con otras lesiones y patologías: "Este invierno tuvimos a una tortuga que entró por captura accidental, pero en los análisis vimos que también se había tragado un mechero", ha afirmado la responsable de Comunicación.
"Debemos pararnos, pensar qué estamos haciendo mal y qué podemos hacer para cambiarlo, porque puede que todavía estemos a tiempo", ha concluido por su parte Belenguer, que apuesta además por divulgar "lo natural". Así, ha destacado la necesidad de explicar el entorno natural, pues ha asegurado que "solo se protege y se quiere lo que se conoce".
Por otro lado, Jiménez ha coincidido en que, aunque se trata de "animales muy resistentes", la presencia de plásticos en el mar puede suponer un serio peligro para las tortugas. Según ha explicado, a lo largo de su vida "tragan muchos plásticos pensando que forman parte de su alimento, como por ejemplo medusas". En ocasiones, son capaces de eliminarlos de su organismo, pero en muchos otros casos no lo hacen.
Además, matiza que, según datos de la Universitat de Valncia, "hace 20 años las tortugas llevaban más carga de plástico", y ha opinado que actualmente existe una mayor concienciación al respecto. No obstante, ha resaltado que "la presencia del plástico en el mar y en las playas es impresentable".
Con el objetivo de conseguir la mayor difusión posible de todas estas cuestiones, la campaña cuenta con la participación de la Generalitat, que, por una parte, colabora en la Red de Varamientos a través de la Conselleria de Agricultura y, por otra, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana ha colocado cartelería de la campaña en estaciones de Metrovalencia y el TRAM de Alicante.
Asimismo, participan Cruz Roja, Universitat de Valncia, Global Omnium y Fundación Oceanogrfic, además de un total de 43 ayuntamientos de la Comunitat Valenciana.
