VALENCIA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, José Ramón García Antón, mostró hoy su indignación por que el Gobierno central proponga reducir "unilateralmente" los caudales del trasvase Júcar-Vinalopó y se quejó por el trato que el Consell recibe desde el Ministerio de Medio Ambiente en una obra "tan importante como el Júcar-Vinalopó".
García-Antón, en un comunicado aseguró que es "indignante que sin previo conocimiento de la Conselleria aparezcan informes del Júcar-Vinalopó donde se disminuyen los caudales de forma importante, aproximadamente en un 35%, de manera que se pasaría de trasvasar 80 a 51 Hm3, todo ello sin previo conocimiento y de forma unilateral, desde la postura de la nueva cultura del agua en la que se sigue manejando el futuro de los recursos hidráulicos de esta Comunitat".
El conseller consideró que el Gobierno adopta con esta decisión "una postura sectaria que no merecemos y a la que vamos a hacer frente".
"Nos parece que no es de recibo que se emitan informes desde la propia CHJ sin tener en cuenta para nada al Gobierno valenciano, no lo podemos consentir, sobre todo teniendo en cuenta que estamos haciendo una enorme inversión para depurar y reutilizar el agua y para modernizar regadíos, sobre todo en la cuenca del Júcar y en los regadíos del sur, que comportan un ahorro muy importante", afirmó.
"De esta forma, en vez de repartirse ese ahorro de agua de forma equitativa, como figuraba en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Júcar, cada vez llega menos al Vinalopó, cada vez el agua es de peor calidad, mientras que se respetan todas las condiciones de Castilla La Mancha cuando es, además, el Consell quien paga esa modernización de regadíos, porque desde el Gobierno de Castilla La Mancha no se sufraga absolutamente nada", explicó García Antón.
El conseller indicó que "esta es la respuesta del Gobierno a una política racional de los recursos, de modernización de regadíos, de depuración, de reutilización y de grandes inversiones para hacer el mejor aprovechamiento de los recursos".
Frente a esta política "se nos paga cada vez con desprecio, con menos agua para nuestras necesidades, con la problemática del Vinalopó, del Tajo-Segura, y con la ausencia total del agua del Ebro". Por el contrario, "tenemos que ver cómo se están poniendo día a día en marcha más regadíos en la cuenca del Ebro, tanto en Cataluña como en Aragón".
Por ese motivo, García Antón aseguró que "vamos a hacer frente a esa postura unilateral del Gobierno central que no merecemos y exigimos al Ministerio de Medio Ambiente que se recupere la política de acuerdos y consenso, es decir, la política racional para que las inversiones no caigan en saco roto".
