VALENCIA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Universitari La Fe de Valencia ha ampliado el programa de preservación de fertilidad en pacientes oncológicas para aquellas niñas y adolescentes diagnosticadas de determinados tipos de cáncer y con un riesgo elevado de infertilidad o fallo ovárico precoz en el futuro, derivado del tratamiento, según informó la Generalitat en un comunicado.
Hasta la fecha, se han adherido al programa cinco pacientes, de entre ocho y 18 años, con diagnósticos de Linfoma de Hodking, sarcoma de Ewing, tumor cerebral y tumor ovárico bilateral. Además, cuatro de estas menores han firmado ellas mismas, junto con sus responsables legales, los consentimientos informados para llevar a cabo el procedimiento.
Este programa de preservación de la fertilidad, iniciado en junio de 2008, está coordinado por la doctora Mª del Mar Andrés, e incluido en el proyecto de investigación Preservación de la Fertilidad en supervivientes de cáncer pediátrico y adolescente, adscrito al grupo de investigación de Oncología Pediátrica que dirige la jefe de Servicio de Oncología Pediátrica del hospital, la doctora Victoria Castel, en el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital La Fe. Además, participan profesionales de los servicios de Ginecología y Reproducción Humana, Cirugía Pediátrica, Anestesiología y Psicología.
La doctora Mª del Mar Andrés, explicó que el programa "pretende identificar a aquellas pacientes oncológicas pediátricas que presentan un elevado riesgo de infertilidad en el futuro y ofrecerles las mejores opciones de preservación para ellas, contando con los últimos avances en reproducción asistida".
La especialista señaló que "mientras en los pacientes varones en edad puberal con diagnóstico de cáncer se pueden criopreservar muestras de semen, la opción para las niñas pasa por la crioconservación de corteza ovárica, tanto en puberales como prepuberales, posible desde hace muy pocos años".
De este modo, la novedad en el programa de preservación de fertilidad en el Hospital la Fe se centra en poder aplicar estás técnicas sin límite de edad inferior y, en el caso de determinadas pacientes pediátricas diagnosticadas de leucemia, empleando además de la criopreservación de la corteza, procedimientos adicionales como el aislamiento de folículos o la maduración in vitro de folículos primordiales para evitar la posibilidad de reintroducir células cancerosas.
En principio, las pacientes candidatas al programa son aquellas que reciben radioterapia pélvica o craneoespinal a dosis elevadas, las que van a ser sometidas a un trasplante de precursores hematopoyéticos y aquellas cuyo tratamiento incluye dosis elevadas de agentes alquilantes, como el linfoma de Hodking o el sarcoma de Ewing.
Así, una vez las propias pacientes y sus tutores han consentido la adhesión al programa, la técnica de extracción del tejido ovárico se practica coincidiendo en una intervención programada para el tratamiento, como la colocación de un catéter venoso para la administración de quimioterapia, para evitar una nueva intervención que precise anestesia. De este modo, "la técnica de preservación de fertilidad no retrasa ni interfiere en el tratamiento del cáncer", destacó la doctora.
Para la realización de este procedimiento y dada la edad de las pacientes, "es preciso una eficiente coordinación entre los Servicios de Oncología, Cirugía y Anestesiología Pediátrica, así como de Ginecología y Reproducción Humana", subrayaron los médicos responsables del programa.
