El IBV pone en marcha un Servicio de Valoración de Accidentados de Tráfico para analizar las repercusiones

Actualizado: domingo, 27 diciembre 2009 12:39

VALENCIA, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) ha puesto a punto el Servicio de Valoración Biomecánica de Accidentados de Tráfico. Este servicio tiene por objeto la realización de pruebas biomecánicas que valoren de forma objetiva las repercusiones funcionales sobre el sistema músculo-esquelético de los siniestros viales.

Estas técnicas se han diseñado en colaboración con diversos equipos médicos y están a disposición de mutuas y aseguradoras. De este modo, se podrán evaluar con criterios científicos la gravedad de las lesiones músculo-esqueléticas relacionadas con el síndrome del latigazo cervical o los mareos derivados de una lesión, según informó la Generalitat en un comunicado.

Más del 50 por ciento de las lesiones que se reclaman a las compañías aseguradoras tienen como diagnóstico principal el esguince cervical, según el IBV, quien añadió que las técnicas de radiodiagnóstico actuales --radiografía, tac o resonancia magnética-- no permiten obtener hallazgos en gran parte de los esguinces cervicales.

La aplicación de las técnicas biomecánicas del IBV aportará "una nueva solución a las grandes dificultades que tienen los médicos para valorar este tipo de esguince cervical". Además, algunos pacientes "tienden a exagerar o simular el cuadro doloroso o la limitación funcional ante la posibilidad de obtener una ganancia secundaria", aseguró el instituto.

OBJETIVAR SÍNTOMAS SUBJETIVOS

Concretamente, las aplicaciones tecnológicas diseñadas por el IBV permiten "objetivar los síntomas subjetivos" como el dolor cervical o la sensación de inestabilidad, que se dan con frecuencia tras el esguince cervical por accidente de tráfico.

Estas aplicaciones registran variables cuantitativas difícilmente manipulables, las analizan y las comparan con patrones de movimiento de personas sanas, lesionadas o incluso que estuvieran magnificando los síntomas de una lesión.

El resultado que se obtiene de este análisis permite establecer cuál es la repercusión funcional de una lesión por accidente de tráfico y en qué grado le afecta. Estos datos facilitarán a los organismos evaluadores y las aseguradoras cómo determinar la cuantía de la indemnización que recibirá el paciente y establecer las pautas rehabilitación.

En la actualidad, se estima que las lesiones músculo-esqueléticas derivadas de un accidente de tráfico suponen un coste medio de 4.500 euros, sin incluir los gastos de asistencia sanitaria, ni el coste indemnizatorio de los pacientes con incapacidad permanente, según datos del IBV.

Asimismo, según el instituto valenciano, el coste económico que conllevan lesiones con síntomas "tan subjetivos" como el dolor cervical o los mareos "hace recomendable que se tengan en cuenta las técnicas biomecánicas del IBV para esclarecer el grado de enfermedad que sufre el paciente".

Concretamente, el Instituto Nacional de la Seguridad Social y los Equipos de Valoración de Incapacidades ya las han reconocido como pruebas médicas complementarias de utilidad para objetivar el dolor cervical y la sensación de inestabilidad a los sistemas NedCervical/IBV y NedSVE/IBV, entre otras pruebas de valoración biomecánica.

Estas herramientas también se utilizan cada vez más en el control evolutivo de un paciente. Las técnicas biomecánicas del IBV permiten también reducir las discrepancias entre el médico de la compañía de seguros, el médico forense y el facultativo al que acude el paciente, cuando un juez tiene que baremar el grado de lesión sufrida en un accidente. La puntuación de este baremo oscila según la gravedad, por lo que es esencial que se pueda eliminar la subjetividad de estas cuestiones.