Inmigración.- Zapatero defiende hacer una política "con la cabeza pero también con el corazón" pero "desde la legalidad"

Actualizado: sábado, 7 octubre 2006 18:23

Afirma que "no debe haber ni fariseismo ni hipocresía ni demagogia" y critica querer "arrancar votos" con el "discurso antiinmigración"

VALENCIA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que "hay que hacer una política de inmigración con la cabeza pero también con el corazón", pero "desde la legalidad, y también desde los derechos humanos", precisó, y "sabiendo --añadió-- que la inmigración es enormemente positiva para nuestro crecimiento económico y necesaria para nuestro futuro".

Zapatero, que participó hoy en un acto público celebrado en Valencia, en el que también intervinieron el secretario general del PSPV-PSOE y candidato a la Presidencia de la Generalitat valenciana, Joan Ignasi Pla y la candidata socialista a la alcaldía de Valencia, Carmen Alborch, subrayó que en España "no debe ni debe haber ni fariseismo ni hipocresía ni demagogia".

El jefe del Ejecutivo central aseguró que el PP "habla de la regularización masiva que hicimos, y no --apostilló--, masiva fue la entrada de inmigrantes ilegales que estaban trabajando aquí con su gobierno" y lo hacían, dijo, "en fraude, sin derechos, sin deberes, sin obligaciones, sin cotizar", mientras que a los populares "les daba exactamente igual" y miraban "para otro lado", destacó.

Asimismo, señaló que "un país que ya sabe lo que es el miedo al otro, ha sufrido el aislacionismo, y ha vivido en sus carnes lo que es tener que ir a emigrar y a trabajar fuera" es un país, dijo, "que tiene que dar ejemplo de comportamiento ante los que vienen de fuera a buscar su futuro, su vida y su dignidad".

En este punto, consideró que "aunque algunos crean que valen más los votos que defender valores, que --destacó-- entronca con lo más íntimo de ser humano, persona y ciudadano", y que "con el discurso antiinmigración van a arrancar algunos votos", esto, a su juicio, demuestra que "conocen muy poco la madurez, la solidaridad y la ciudadanía de este país".

Estimó que el "cambio que está viviendo España, exige ante todo, como siempre que hay que hacer ciudadanía --puntualizó--, política social y gasto social en educación, en sanidad y en vivienda", todo ello, destacó, "para que haya una buena integración y una buena convivencia y nadie sienta que pierde con el beneficio de la gente que viene a trabajar a nuestro país". Ese, aseguró, "es el camino y el rumbo a seguir".

Zapatero se dirigió a los asistentes al acto y afirmó que "merece la pena hacer el esfuerzo", ya que, a su juicio, "lo más importante, incluso más que las inversiones en carreteras y autovías, es que sigamos invirtiendo en principios de convivencia", resaltó el dirigente socialista, que aseveró que "ese es el valor de la democracia".

Por otro lado, afirmó que "es un orgullo gobernar la España de todos", al tiempo que indicó que, "hace un año, cuando estábamos en el debate de la reforma del Estatut de Cataluña, la derecha decía que este país se iba a romper y fueron por las calles y medios de comunicación, en ese tono de moderación que les caracteriza --ironizó--, a decir que España se rompía, que la economía se iba a ir al desastre y que se iba a romper la solidaridad".

"COMO UNA ROCA"

Al respecto, remarcó que "un año después, España está como una roca, económica y políticamente, fuerte en el concierto internacional, avanzando en economía y en derechos sociales, que es lo quiere la ciudadanía en este país", resaltó.

"Además --añadió-- avanzando también sin temor y sin miedo, que ha sido el argumento siempre de la derecha para encoger España, para no dejarla que progresara, para no abrir otras perspectivas ni disfrutar de lo que representa la libertad, la diversidad, las culturas, las lenguas y el respeto al otro", destacó.

Así, incidió en que "ese mensaje del miedo se acabó hace muchos años en la España joven de la democracia" ya que, según estimó, "ese mensaje del miedo es para la España antigua, aislada y sin valores que durante tanto tiempo no nos dejo vivir en paz y felizmente".

Manifestó también que el PSOE "vertebra este país" y "es capaz de acordar reformas de estatutos con el PP y con los nacionalistas", así como de "ejercer de fuerza integradora, llevar adelante la armonía y la cooperación, y de respetar la pluralidad y hacerla convivir" para que esa "convivencia de pluralidad" sea "una fuente de riqueza, de energía y de progreso", subrayó Zapatero.

En esta línea, instó al PSPV a sentirse "orgulloso" de haber pactado con el PP el texto estatutario valenciano, porque, según manifestó, "aunque estéis en la oposición, habéis servido a la Comunitat Valenciana y a España, y a un proyecto de cohesión y de integración".

LEY DE DEPENDENCIA

Por otra parte, aludió a la aprobación del Parlamento de la Ley de la autonomía personal o de la Dependencia que, según destacó, "va a mejorar la vida de muchas familias, concretamente --precisó-- en la Comunitat va a haber 150.000 personas" que se beneficiarán de esta ley. Anunció que el Ejecutivo central destinará 400 millones de euros a la Comunitat para atender a esas personas, por lo que, dijo, "necesitaremos un gobierno comprometido con las necesidades sociales" que permita "completar el proyecto de situarnos a la cabeza en nivel de bienestar", resaltó.

Destacó también la "importancia" de defender "la educación gratuita universal, una sanidad pública y pensiones publicas para todos", así como garantizar una "atención a los que no se pueden valer por si mismos", y "combatir el fracaso escolar", para que haya una "educación incluyente", que evite la "segregación en la escuela", que luego podría trasladarse a la sociedad, explicó.

Asimismo, alabó la labor de la secretaria de Cooperación, la valenciana Leire Pajín, que, dijo, "está siendo la cara de esa España de la solidaridad, de los buenos valores y de los mejores principios" y del país que ha "duplicado" la ayuda a la cooperación al desarrollo, al tiempo que destacó que Pajín "podrá decir con orgullo cuando acabe la legislatura que España dedica el 0,5 por ciento de su PIB al desarrollo".

Finalmente, agradeció su trabajo al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, también presente en el acto, al que, según afirmó, el PP "ha criticado mucho porque defiende la paz, el diálogo con todos los pueblos" y "quiere que España haga la historia de la paz y la solidaridad con todos los países del mundo", concluyó.