José Sacristán ayuda a Delibes a recuperar a su mujer desde la memoria del amor con 'Señora de rojo' en el Olympia

José Sacristán en un momento de la obra 'Señora de rojo sobre fondo gris'
José Sacristán en un momento de la obra 'Señora de rojo sobre fondo gris' - PENTACIÓN ESPECTÁCULOS

VALNCIA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

El actor madrileño José Sacristán ayuda al escritor Miguel Delibes a recuperar a su mujer "desde la memoria del amor" con la obra 'Señora de rojo sobre fondo gris' que se estrena este miércoles en el Teatro Olympia de Valncia y se podrá ver hasta el 2 de febrero.

Se trata de un monólogo, producido por Sabre y Pentación, y es la cuarta adaptación teatral de una novela del autor y académico vallisoletano que falleció en 2010. La obra, adaptada por José Sámano, Sacristán y la joven actriz y escritora Inés Camiña, lleva un año sobre los escenarios "y la respuesta del público está siendo muy satisfactoria", ha concretado Sacristán en la rueda de prensa de presentación en Valncia.

Sacristán se encarga en esta obra de contar la historia de la vida de Miguel Delibes junto a su esposa, Ángeles de Castro, a través de un pintor que sufre una crisis creativa desde que falleció su mujer de forma imprevista, que era todo para él, a los 48 años. El telón de fondo es el verano y otoño de 1975. En esas fechas, su hija está en la cárcel por actividades políticas.

Así, Delibes se esconde detrás de este pintor, llamado Nicolás, para, cambiando nombres y detalles, oscurecer la auténtica naturaleza del retrato. El actor se ha mostrado "fascinado" con la novela del escritor y así se lo hizo a saber, pero éste nunca ha querido dar los derechos porque "no quería que nadie le pusiera cara", ha dicho.

Sin embargo, dos años antes de morir, y tras insistirle, Delibes consintió que Sacristán leyera un par de pasajes de la novela. Luego se puso en contacto con Sámano para hacer una adaptación del libro al teatro, se lo presentaron a los hijos tras fallecer su padre y éstos la autorizaron.

Al subirse al escenario, ha explicado el actor, acompaña a Delibes a mirarse y a mirarnos en la pérdida --de su ser querido-- y, a partir de la memoria del amor, recuperar la vida de esa persona, "que hace que permanezca".

"Interpretar a este personaje es un regalo, sus estados de emoción... y el valor añadido que tengo es que Delibes era amigo mío, y lo admiré y lo quise profundamente", ha aseverado. "Esta obra es una de las cosas más satisfactorias que he hecho en mi carrera profesional, un homenaje a mi amigo", ha añadido.

De hecho, ha comentado que tiene "serias dudas" de que después de esta obra pueda encontrar nada que pueda interesarle para volver a hacer teatro. "Creo que con 'Señora de rojo' se puede dar por acabado mi recorrido", ha explicado, y preguntado por si también tiene previsto dejar el cine, ha dicho: "cada vez me molestan más los rodajes de 10-12 horas, el exterior-noche... cada día lo llevo peor. Pero me encanta compartir momentos con actores jóvenes, convivir con ellos es formidable y un aprendizaje", ha afirmado.

Cuando sale del escenario, desconecta de la obra: "Yo hago de Nicolás y me voy, y sigo con mi vida. En mi trabajo creo ser una buena correa de transmisión de los estados de emoción, pero no lo aplico a mi experiencia personal, para mí no es terapéutico", ha señalado.

Sobre el tipo de público al que se dirige el espectáculo, el actor ha comentado que predominan las personas mayores pero también están interesados muchos jóvenes. "El lenguaje de Delibes es accesible a todos, al igual que la narración de hechos del dolor", ha aseverado.

HISTORIA DE AMOR

Esta obra teatral es el relato de una historia de amor en un camino desenfrenado hacia la muerte, que nos sitúa en aquella España con rasgos inequívocos, que nos habla de la felicidad y de su pérdida, y que llega a la intimidad de cada ser humano, y a su emoción, por el camino recto y simple de la verdad.

Un amor que se llena de dramatismo, y quizá de mayor plenitud, cuando aparece, primero sin hacer ruido, y después como una brutal ruptura, la enfermedad. Un sobrecogedor retrato de "una señora de rojo", tan luminosa, "sobre el fondo gris" de todas las circunstancias que rodean su final.