VALENCIA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gremi de Llibrers de València y la Associació d'Editors del País Valencià (AEPV) han advertido de que, en el año 2014, solo por las fuertes caídas del libro de texto, las librerías valencianas han perdido más 20 millones de euros y el 30 por ciento de los puestos de trabajo, por lo que han avanzado que en las próximas semanas presentarán a la Generalitat y partidos políticos una propuesta de sistema de ayudas para la adquisición de los libros de "texto plural y sostenible"
Según detallan la asociación de editores y del gremio de libreros en un comunicado, la campaña de libro de texto 2014 ha supuesto una caída de las ventas de más del 20% en relación en 2013. Así, este año se han facturado poco más de 70 millones de euros, 20 millones de euros menos que el año anterior.
En este sentido, agregan que "desde 2012 las librerías y editoriales valencianas venden sufriendo una caída sostenida de las ventas y en los últimos tres ejercicios han caído las ventas del libro de texto un 30%, lo que se ha traducido en una perdida de facturación de más de 30 millones de euros en tres años".
"Esta fuerte caída de las ventas del libro de texto está acompañada de otra mengua todavía más preocupante, como es el descenso del 60% de las ventas en material complementario y libros de lectura", advierten.
"SITUACIÓN SIN SALIDA"
Esta situación ha llevado a muchas librerías a "una situación sin salida". Al respecto, de acuerdo a los datos del Gremi de Llibrers de Valencia, sólo al 2014 se ha perdido el 30% de los puestos de trabajo en las librerías valencianas.
"Una situación muy complicada, que todavía es más dramática si consideramos que para muchas librerías valencianas la campaña del libro de texto supone un 30% de su facturación. Esta brutal caída de las ventas ha conduit a una situación insostenible para muchas librerías que se han visto obligadas a reducir gastos al máximo, reducir recursos humanos despidiendo trabajadores, e incluso, cerrando", expone el presidente del Gremi, David Cases.
El sector considera que "las causas de la caída de las ventas del libro de texto ha sido provocada, sobre todo, por la carencia de ayudas públicas y la pérdida de becas que ha hecho que el gasto económico del libro de texto haya repercutido directamente a las familias, ya de por sí con unas economías muy apuradas".
Por otro lado, recuerdan que "la Generalitat Valenciana suprimió este año las ayudas para la compra de libros de texto y sólo mantiene una bonificación a los parados por este concepto en la declaración de la Renta y, además, la Comunitat es la única autonomía del Estado Español donde no se ha convocado ninguna beca durante el 2014".
En esta caída de las ventas también ha influido, a juicio de estas entidades, "la decisión tomada en junio de 2014 por la Generalitat Valenciana de mantener la vigencia de los libros de texto de Primaria de cuatro a seis años, alargando su vida útil, de modo que las familias han reutilizado los libros de cursos anteriores y que tenían que haber desaparecido en el curso 2014-2015 con la implantación de la nueva Ley de Educación (Lomce)".
Los centros docentes valencianos han continuado utilizado todos los libros, excepto los de las materias que modifica el currículum, como Coneixement del Medi e Inglés. Asimismo, lamentan que "se ha creado una competencia desleal con las editoriales al proporcionar materiales gratuitos para nuevas asignaturas como Cultura Valenciana".
Finalmente, en esta caída de las ventas ha influido la implantación de bancos de libros incentivados por Generalitat Valenciana a muchas escuelas valencianas. "Es bien cierto que los bancos de libros ayudan a la economía familiar pero no solucionan el problema puesto que, entre otras cosas, la administración valenciana no ha contemplado la renovación y actualización del banco", argumentan.
Editores y libreros precisan que no se oponen a la creación de bancos de libros, pero reclaman al Consell "una política de ayudas para la adquisición de los libros de texto que sea sostenible, plural, que esté consensuada con el sector del libro, los centros docentes y las asociaciones de padres, que no vaya en contra la supervivencia de los editores, las librerías y sus familias, y que respete los derechos de autor".
ACORTAR EL PLAZO Y CAMBIO NORMATIVO
Entre otras propuestas, apuestan por acortar el plazo de renovación de libros y proponer un cambio normativo para ampliar las condiciones para la desgravación en la declaración de la renta.
Por último, recuerdan que varias medidas de la administración educativa valenciana --como la creación de materiales curriculares, la ampliación del uso de los libros de texto a 6 años y la puesta en marcha de Llibrei-- han llevado a la Asociación Nacional de Editores de Libros y Material por la Enseñanza (ANELE), después de haber presentado a la Consejería de Educación, Cultura y Deporte diferentes requerimientos "sin obtener ninguna respuesta", a presentar acciones judiciales.
