Se tendrá que estudiar una eventual nueva convocatoria de fiestas
CASTELLÓ, 10 Mar. (EUROPA PRESS) - -
La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, ha lamentado que la ciudad no pueda celebrar en estos momentos su semana grande tras el aplazamiento de las fiestas de la Magdalena a causa de la crisis del coronavirus, pero ha recordado que, ante una emergencia sanitaria internacional, "debe prevalecer el interés general".
El Ayuntamiento de Castelló ha informado en un comunicado del aplazamiento de las fiestas de la Magdalena ante la instrucción del Ministerio de Sanidad "que establece la conveniencia de no celebrar los actos festivos en las fechas previstas hasta que la situación sanitaria lo permita".
"Se trata de una cuestión de salud pública y, aunque nos duela que la ciudad de Castelló no pueda celebrar su semana grande en estos momentos, ha de prevalecer el interés general ante una emergencia sanitaria de carácter internacional", ha afirmado la alcaldesa.
Marco ha indicado que son decisiones "duras" que vienen determinadas por las administraciones competentes y que se han de ejecutar "por responsabilidad", y ha recordado que todos tienen en su entorno a personas con salud vulnerable y "las instituciones públicas tiene el deber de minimizar riesgos".
De esta manera, las fiestas de la Magdalena quedan aplazadas ante las directrices sanitarias. "Nuestra voluntad es que se puedan retomar cuando haya plenas garantías de que su celebración no afectará a la población", ha detallado Marco. No obstante, se tendrá que estudiar una eventual nueva convocatoria de fiestas en el seno de la institución municipal y, en su caso, se comunicará en el momento oportuno, según ha indicado el consistorio.
JUNTA DE PORTAVOCES EXTRAORDINARIA
La alcaldesa convocará este miércoles una junta de portavoces extraordinaria y una reunión con representantes del 'món de la festa' para dar cuenta de las medidas adoptadas ante el coronavirus.
Por su parte, el portavoz del Podem-EUPV en el Ayuntamiento, Fernando Navarro, ha señalado en un tuit que el aplazamiento de las fiestas es una decisión "difícil", pero "la salud de la ciudad es lo primero".
