VALENCIA, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
Más de una veintena de profesionales se incorporarán durante esta semana a todos los departamentos de la conselleria de Sanidad para impulsar la investigación sobre la mejora de la calidad y seguridad de la atención a los pacientes.
Fuentes de Sanidad afirmaron que el objetivo de estas becas es "facilitar la formación, capacitación científica y desarrollo instrumental adecuado para optimizar las investigaciones sobre las estrategias orientadas a la mejora de la calidad y la seguridad de la prestación asistencial".
El conseller de este departamento, Rafael Blasco, explicó que tanto la calidad como la seguridad clínica son "dos materias prioritarias para la Conselleria y, así lo reflejan, --recordó-- las líneas del Plan de Excelencia de la Sanidad valenciana".
"De esta forma se manifiesta que la preocupación asistencial y la seguridad de los pacientes debe ser un elemento vertebrador del sistema sanitario", explicó.
Así, resaltó que con esta iniciativa se consigue que 21 titulados universitarios, entre farmacéuticos, biólogos y psicólogos, entre otros, colaboren en proyectos y acciones de investigación sobre la mejora en la calidad y seguridad en la atención al paciente.
Estos profesionales --indicó-- trabajarán en la medición de la calidad de la asistencia mediante el diseño de indicadores, en la gestión por procesos y en la identificación de problemas de calidad, "como el manejo y aplicación de las herramientas de mejora de calidad, es decir gráficos de control y diagramas causa efecto, entre otros", manifestó.
Asimismo, explicó que los profesionales también investigarán sobre "la incidencia y la prevalencia de problemas de seguridad asistencial, analizarán la utilización adecuada de los servicios sanitarios y sus determinantes". Además, durante el periodo de formación participarán en las actividades emprendidas en cada centro en materia de seguridad y calidad asistencial, indicó.
Por último, el conseller aseguró que se mejorará la seguridad de los pacientes que se concretará en líneas de actuación como "la identificación inequívoca de pacientes, bioseguridad", así como un uso seguro del medicamento al alta hospitalaria, estudios EPIDEA --Prevalencia de efectos adversos en la Asistencia Sanitaria-- y la sensibilización de los profesionales".
