Los Max premian la renovación y las ganas de soñar a lo grande de las artes escénicas valencianas

El espectáculo 'Kity Kraft'
VICENTE JIMÉNEZ/BAMBALINA
Publicado: martes, 19 junio 2018 12:38

VALÈNCIA, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

Representantes de las producciones de la Comunitat Valenciana que se han hecho con un Premio Max han expresado su satisfacción por haber conseguido este reconocimiento al esfuerzo y al talento, al tiempo que han llamado la atención sobre la necesidad de que las instituciones apoyen al sector con el fin de que los artistas puedan seguir "renovando el lenguaje" creativo y "soñando a lo grande".

En la ceremonia que acogió anoche Sevilla, se llevaron una 'manzana' 'Tic-tac', al mejor espectáculo musical; y 'Kiti Kraft', al espectáculo infantil, juvenil o familiar. Asimismo, Ángel Solo y Adolfo Fernández entraron en el palmarés por su adaptación en 'En la orilla', basada en la novela de Rafael Chirbes, y coproducida por la valenciana La Pavana, la compañía vasca K. Producciones, Emilia Yagüe Producciones y el Centro Dramático Nacional; y el actor abulense Nacho Sánchez fue nombrado mejor actor protagonista por su trabajo en 'Iván y los perros', también de La Pavana.

'Tic-Tac' es un musical coproducido por el Institut Valencià de Cultura y la Diputación de València escrito por Carles Alberola, Rodolf Sirera y Pasqual Alapont. Se trata de un montaje sobre la necesidad de la ficción en nuestra vida, de un territorio mágico donde los sueños se hacen realidad. Alberola ha manifestado, en declaraciones a Europa Press, que este Premio Max es "un altavoz" que, confía, pueda ayudar a que aún más gente vea esta pieza en su vuelta al Teatro Principal de València en Navidades.

Para el dramaturgo y actor, el secreto de esta función --que ya arrasó durante su exhibición en la cartelera valenciana-- es que "tiene mucho trabajo detrás en todas las vertientes: musical, actoral, audiovisual y coreográfica". Además, "cuenta una historia que emociona a la gente y que araña el alma de las personas".

Para el artista, las producciones valencianas llevan unos cuantos años consiguiendo una mayor visibilidad en el Estado y ha subrayado que para que esta tendencia continúe las instituciones deben prestar su apoyo, tanto para la "imprescindible supervivencia, con un mayor nivel de contratación", como para levantar espectáculos de gran formato que ayuden a incrementar el nivel de espectadores.

'Tic-Tac' es una coproducción entre la Generalitat y la Diputación. Para hacer un proyecto de este nivel es "imprescindible que haya instituciones detrás para que podamos soñar a lo grande", ya que tiene un presupuesto alto, ha apuntado.

Alberola ha considerado que en los últimos tiempos se han dado pasos para arropar más al sector, aunque hay quien puede creer que son algo lentos, ya que "cuesta mucho cambiar una situación que era muy complicada" y por eso "hay que continuar apoyando", ha instado.

Por su parte, el director de Bambalina Teatre Practicable, responsable de 'Kiti Kraft' ha mostrado su alegría por un premio para el que, asegura, no estaban "mentalizados". Esta es una pieza que propone un poema visual compuesto por una serie de imágenes de gran poder visual y que discurre por la vida de un títere que adora la música y el canto.

"RESISTENCIA"

Para Policarpo resulta especialmente satisfactorio que el premio se conceda a una compañía que apuesta por los títeres, un arte que está algo relegado y considerado a veces como de segunda. "Se reconoce la resistencia a todo el tiempo dedicado a esta profesión que es tan vocacional", ha comentado el director, que subraya también la voluntad de esta agrupación por renovar el lenguaje de los títeres y no darles solo un contenido pedagógico para el público infantil, sino destacar su parte artística.

Policarpo, que ha comentado que le habría gustado que la cosecha de premios para los representantes del teatro valenciano fuera algo mayor, ha advertido que no hay "mucho que reflexionar" sobre el estado de las artes escénicas valencianas y que eso no se puede proyectar solo en unos premios.

Por último, el premio Max de Honor lo recogió el dramaturgo valenciano José Sanchis Sinisterra, que en su intervención hizo hincapié en que su lucha en el teatro radica en "el amor por la palabra y el texto escrito", y ha celebrado el "ingreso" de "una verdadera legión de autoras y dramaturgas" en el mundo de las artes escénicas. "Va a ser muy importante para el futuro de la fertilidad del texto dramático", aseveró.