VALENCIA, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario autonómico de Sanidad, Manuel Cervera, afirmó que todas las oficinas de farmacia de la Comunitat Valenciana ya tienen implantados los lectores de las tarjeta sanitaria (SIP), los cuales posibilitan tener información sobre el consumo farmacéutico individualizado de los pacientes y su procedencia, estudiar el consumo farmacéutico por sexo y grupos de edad, así como imputar el gasto farmacéutico a los departamentos de salud en función del origen del paciente, según informaron hoy fuentes de la Generalitat.
Asimismo, el también gerente de la Agencia Valenciana de Salud indicó que la conselleria prevé recibir en mayo el informe correspondiente al mes de abril, que le remitirán las farmacias de la autonomía valenciana, y que presentan los datos "suficientes" para elaborar el perfil farmacoterapéutico de los pacientes, que, explicó, "permitirá tener una información exacta sobre el consumo de medicamentos que realizan los pacientes de la Comunitat".
El secretario autonómico manifestó también que la tarjeta sanitaria "posibilitará que el facultativo sepa la historia clínica del paciente, qué se le ha prescrito y qué se ha dispensado, por lo que conocerá la vida sanitaria del paciente, lo que será un elemento de apoyo en siguientes diagnósticos".
Las mismas fuentes indicaron, además, que los lectores farmacéuticos permiten obtener información sobre el consumo que realizan los pacientes de otras comunidades autónomas, así como de países extranjeros.
Asimismo, explicaron que la nueva iniciativa de la Conselleria supone que el paciente acude a su farmacia con la receta prescrita y el farmacéutico le solicita la tarjeta SIP, que obligatoriamente deberá presentar para que le sea dispensado el medicamento, y, a continuación, el facultativo pasa la tarjeta SIP por el lector, que captura el número del paciente y lo asocia a las recetas que el facultativo le ofrece.
De esta forma, las oficinas de farmacia generarán mensualmente el fichero de pacientes y lo remitirán a los Colegios Oficiales de Farmacéuticos, los cuales unificarán los ficheros remitidos desde las oficinas de farmacia, y enviarán un fichero único a la conselleria de Sanidad.
Cervera afirmó que los lectores en las farmacias "son un paso previo a la implantación de la receta electrónica en la Comunitat, y destacó también que la tarjeta SIP "se convierte en la puerta de entrada al sistema sanitario en la Comunitat".
Por otro lado, según los últimos datos de este departamento, durante el año 2005 se expidieron un total de 93 millones de recetas, cifra que supone una media de 20 recetas por habitante al año.
En este sentido, a juicio de Cervera, "con estas volumen anual de recetas es a la vez lógico y necesario establecer un control lo más exhaustivo posible del consumo de medicamentos que realizan los habitantes de la autonomia".
