VALENCIA, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Sanidad va a formar a más de 1.000 médicos y enfermeras de los 23 departamentos sanitarios de la Comunitat Valenciana con objeto de que actualicen sus conocimientos y mejoren sus habilidades para el diagnóstico y tratamiento de la osteoporosis, según informaron fuentes de este departamento a Europa Press.
En concreto, este programa docente 2009-2010 consiste en la realización de cursos presenciales y on-line a través de la Escuela Valenciana de Estudios de Salud (EVES), en el contexto del programa ESOSVAL (Estudio Valenciano de Osteoporosis).
ESOSVAL es un programa impulsado por médicos de Atención Primaria que se enmarca en el II Plan de Prevención y Control de la Osteoporosis de la Comunitat Valenciana y que tiene como objetivo principal mejorar el abordaje del paciente con osteoporosis o con riesgo de padecerla.
La osteoporosis es una enfermedad silenciosa que, como tal, no da ningún síntoma, pero su consecuencia natural, la fractura, es el "verdadero problema" de salud ya que genera "morbilidad y mortalidad" y "tiene repercusiones sanitarias, sociales y económicas de gran calado".
Además, a través del programa ESOSVAL también se impulsan estudios de investigación en el contexto de la práctica clínica. Así, en estos momentos se han puesto en marcha dos estudios dentro del programa en el Centro Superior de Investigación en Salud Pública (CSISP): ESOSVAL_R y ESOSVAL-F.
El primero de ellos, el estudio ESOSVAL_R, tiene como objetivo principal desarrollar una escala de predicción del riesgo de fractura osteoporótica en población adulta de la Comunitat Valenciana y evaluar su validez. Para ello, se seguirán durante un período inicial de cinco años a 15.000 hombres y mujeres mayores de 50 años residentes en la Comunitat en centros de salud que tengan implantada la historia clínica electrónica Abucasis II.
Así, la fuente fundamental para la obtención de datos será la historia clínica electrónica, que será completada con el registro de morbilidad hospitalaria, los registros de urgencias hospitalarias y el registro de mortalidad de la Conselleria de Sanitat.
Por su parte, el estudio ESOSVAL_F tiene como objetivo principal evaluar el impacto de una intervención combinada (formación teórica y práctica de los profesionales, mejora de los sistemas de información e incentivos) en la mejora del diagnóstico y tratamiento de la osteoporosis.
Por último, con el programa ESOSVAL también se mejoran los sistemas de información de la historia clínica electrónica de atención ambulatoria. Para ello se ha incorporado una hoja de seguimiento con variables y factores relacionados con el riesgo de presentar osteoporosis que facilita a los profesionales sanitarios la detección precoz y el seguimiento de pacientes con osteoporosis o con riesgo de presentarla. Además, han sido incorporadas tablas y escalas que facilitan este objetivo al Sistema de Abucasis.
ENFERMEDAD DEL ESQUELETO
La osteoporosis es una enfermedad sistémica del esqueleto, caracterizada por la disminución de la resistencia ósea que predispone a un aumento del riesgo de fractura. Los lugares más frecuentes donde se produce la fractura osteoporótica son la columna vertebral dorsolumbar, la cadera y la muñeca. La fractura de cadera, por su morbimortalidad, es la consecuencia mas grave de la osteoporosis.
En España, se estima que la incidencia anual de la fractura de cadera en mayores de 50 años oscila entre el 2 y 3 por cada 1000, con una relación varón/mujer de 2-3/5. Estas cifras aumentan considerablemente con la edad estimándose para los mayores de 60 años una incidencia global entre 500-700 casos por 100.000 habitantes y año, manteniéndose el predominio de las mujeres.
Respecto a la fractura vertebral, en un estudio poblacional reciente realizado en Valencia con mujeres postmenopáusicas mayores de 50 años, la prevalencia de fractura vertebral morfométrica para las mujeres postmenopáusicas mayores de 50 años fue del 21% y de 46% para las mayores de 75 años.
La repercusión social y sanitaria de la fractura osteoporótica es muy importante. La mortalidad por la fractura de cadera, en pacientes hospitalizados, se sitúa entre el 5 y 8%; el primer año llega al 20-30% y de los supervivientes solo un tercio vuelven a su situación previa a la fractura.
