Sanidad hará cerca de 43.000 visitas a establecimientos para evitar toxiinfecciones alimentarias en verano

Actualizado: sábado, 15 julio 2006 17:42

VALENCIA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

La conselleria de Sanidad realizará un total de 42.500 visitas de control a establecimientos de los diferentes sectores alimentarios de la Comunitat Valenciana con el objetivo de evitar toxiinfecciones en verano.

Esta actuación se enmarca dentro del Programa de Vigilancia Sistemática en Industrias y Establecimientos Alimentarios y del Programa de Vigilancia Sanitaria de Alimentos, mediante los cuales, la Dirección General de Salud Pública de la conselleria de Sanidad organiza las actuaciones de control alimentario en la Comunitat Valenciana necesarias para garantizar la protección de los consumidores.

El conseller de Sanidad, Rafael Blasco, recordó que "el control sanitario de los alimentos tiene como finalidad garantizar a la población unos alimentos sanos, seguros y saludables, para lo que se vale de intervenciones a lo largo de la cadena alimentaria, con la finalidad de eliminar o reducir los posibles riesgos para la salud".

Indicó que el riesgo de brotes se intensifica en la temporada estival debido a la alta temperatura ambiental, que favorece el crecimiento bacteriano, y al incremento en el uso de la restauración colectiva en estas fechas --banquetes, comuniones, bodas--.

Así, con el objeto de implicar a todos los ciudadanos en la prevención de toxiinfecciones alimentarias, la conselleria de Sanidad recomienda poner en práctica algunos consejos útiles a la hora de comprar, conservar y preparar las comidas.

Respecto a la compra, Sanidad indicó que es "importante" comprobar el estado de los envases y la información del etiquetado, así como no adquirir alimentos que se deben conservar en frío pero que están expuestos a temperatura ambiente.

En la exposición al público, los alimentos deben estar protegidos mediante vitrinas. Cuando se compren alimentos de consumo directo que no estén envasados hay que exigir, en su manipulado, la utilización de pinzas, guantes de un solo uso u otro instrumento adecuado que evite el contacto directo con las manos del vendedor.

"Se deben rechazar las latas de conservas oxidadas y las que presenten abombamientos, y no utilizar aquellas que desprendan gas al abrirlas ni las que tengan aspecto u olor anormal", apostilló.

Indicó que es preferible adquirir los congelados al final de la compra, ya que ningún producto descongelado total o parcialmente se debe volver a congelar. "Hay que descongelar el producto según las necesidades de consumo y con suficiente tiempo para hacerlo en la nevera y no a temperatura ambiente", señaló.

Una vez en casa, según las mismas fuentes, no hay que sobrecargar la nevera, y los alimentos listos para ser consumidos nunca deben entrar en contacto con los otros crudos, como las carnes, pescados o verduras.

La temperatura del frigorífico debe vigilarse periódicamente, manteniéndola a menos de 4 grados para refrigerar y a menos de 18 grados para la congelación. Así, los alimentos ya cocinados deben ser mantenidos el menor tiempo posible a temperatura ambiente y siempre tapados.

PREPARACION Y LIMPIEZA

La elaboración de las comidas, añadió Sanidad, se debe hacer poco tiempo antes de su consumo, para evitar el crecimiento de bacterias. "Se deben cocinar las cantidades de alimentos que se vayan a consumir, evitando guardar los restos de comida que hayan sobrado".

"Las manos son el medio más importante de transmisión de gérmenes a los alimentos; hay que mantenerlas siempre limpias, especialmente después de utilizar los servicios higiénicos, tocar carnes, pescados o basuras. Es conveniente proteger las heridas de las manos con cubiertas impermeables, como guantes o dediles", subrayó.

Por su parte, la elaboración de comidas caseras, como mayonesas, "requiere especial atención". En su opinión, hay que utilizar siempre huevos limpios y sin roturas y añadir a la mayonesa unas gotas de limón o vinagre para favorecer su conservación; no hay que poner mayonesa sobre otros alimentos hasta que éstos no se hayan enfriado, con el fin de evitar un posible crecimiento de gérmenes.

Por lo que se refiere a las frutas, explicaron que hay que lavarlas siempre antes de su consumo, incluso las que van a ser peladas. Las verduras y hortalizas que se van a consumir en crudo, deben lavarse meticulosamente con agua y unas gotas de lejía de uso alimentario, siguiendo las instrucciones del etiquetado; posteriormente, hay que enjuagarlas con abundante agua potable.

Finalizada la preparación de los alimentos, aconsejaron fregar los utensilios con mucha agua caliente y la cantidad correcta de detergente, dejando que se sequen al aire libre.