VALENCIA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
El detenido por la muerte de una joven de 16 años, cuyo cadáver apareció el sábado en el rellano de la escalera de su domicilio, en el barrio valenciano de Benicalap, ha sido trasladado esta mañana, sobre las 8.30 horas, a la Ciudad de la Justicia, donde está previsto que se le tome declaración a lo largo de la mañana, según informaron a Europa Press fuentes de la Policía Nacional y del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
El detenido, un joven de 20 años que pertenece al entorno de amistades de la víctima, prestará declaración ante el titular del juzgado de instrucción número 11 de Valencia, que ha decretado el secreto de las actuaciones.
El cuerpo sin vida de la menor, de 16 años, apareció a primera hora de la mañana del sábado en el rellano de la escalera de un edificio situado en el número 70 de la calle Periodista Gil Sumbiela de la capital valenciana.
El cadáver fue hallado sobre las 8.30 horas por un vecino del inmueble, quien alertó a la Policía. La joven vivía con su madre, que la noche en que ocurrieron los hechos se encontraba trabajando en turno de noche, ya que es guardia jurado.
Posteriormente, trascendió que dos amigos acompañaron en la noche del viernes a la joven hasta su domicilio. Según comentaron a los medios de comunicación varios conocidos de la víctima, la joven había acudido a un 'botellón' de las fiestas de su barrio, en el Parque Mofla, y sobre las 2.30 horas se fue a su casa acompañada de dos amigos.
Según afirmaron, uno de los dos acompañantes se quedó hablando con la joven en el portal y el otro se fue a casa. La cerradura del portal no estaba forzada, según fuentes policiales.
Asimismo, los conocidos de la joven afirmaron que ésta se había distanciado de ellos hace unos dos años, porque "empezó a ir con otra gente y a entrar en otro mundo". Al respecto, la dueña de un local colindante a la finca en la que vivía la joven, afirmó que "se veía desde hace tiempo que iba a pasar, más que nada por la gente con la que se juntaba".
Esta misma mujer comentó que la víctima dejó hace poco a su novio, y que hacía un par de semanas "se les había visto discutiendo en la calle". Éste, según dijo, "se acercaba con frecuencia a su casa y le llamaba al telefonillo para que bajara, pero su madre lo quería lejos de ahí". No obstante, aseveró que ella "al final, siempre bajaba".
No obstante, la mayoría de los vecinos de la víctima coincidieron en asegurar que la joven era una persona "muy normal" que "nunca había dado ningún escándalo ni nada". "La niña era muy educada, al igual que la madre, que es una persona muy discreta y trabajadora", afirmó otro vecino.
