VALENCIA, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
Miembros de la plataforma Tamquem Cofrents, de la Coordinadora Estatal Antinuclear (CEAN) y activistas de la sociedad civil han desplegado este domingo cuatro pancartas gigantes en el antiguo edificio de colchones Flex, situado en las inmediaciones de la A-3, con las que han reivindicado el derecho de los ciudadanos a "poder dormir tranquilos sin la amenaza de un accidente nuclear".
Así lo ha indicado en declaraciones a Europa Press el portavoz de la plataforma José Juan Sanchis, que ha explicado que el objetivo de esta acción es exigir nuevamente el cierre de la central nuclear de Cofrentes (Valencia), por el riesgo que conlleva para 2,5 millones de personas que residen en el área que podría verse afectada en caso de accidente.
"Queremos reivindicar que las centrales nucleares son totalmente innecesarias y que si se cierran no pasaría nada, ya que es posible conseguir los mismos resultados mediante otras fuentes", ha indicado el responsable, que ha indicado que accidentes como el de Fukushima (Japón) muestran que estas centrales "son inseguras".
En este sentido, ha explicado que la planta japonesa se encontraba a 120 kilómetros de la ciudad y la de Cofrentes está a 60 kilómetros de Valencia, lo que supone poner en riesgo a una población total superior a los dos millones de personas que habitan en un radio de 75 kilómetros alrededor de la central.
Por ello, una veintena de activistas ataviados con monos amarillos se han encaramado a la parte superior del edificio y han desplegado pancartas en las que podía leerse 'Volem dormir tranquils, tanquem Cofrents' (aprovechando el antiguo uso del edificio) o 'Tanquem Cofrents ja'.
A pesar de que agentes del cuerpo de policía se han personado durante el transcurso de la acción, "no ha pasado nada porque se trataba de un acto público y totalmente pacífico", ha indicado el portavoz.
CENIZAS E ISÓTOPOS
Sanchis ha indicado también que "la prueba más palpable de las consecuencias que podría tener un accidente en la central de Cofrentes la tenemos en lo sucedido con los graves incendios que han padecido las montañas valencianas este verano y que quemaron zonas relativamente cercanas a la central", en Cortes de Pallàs.
Así, "si en vez de simplemente cenizas hubieran contenido isotopos radioactivos como los emitidos en los accidentes Fukushima o Chernóbil, todas estas zonas se hubieran vuelto inhabitables durante, al menos, siglos", ha precisado.
