VALENCIA, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
UGT en Radiotelevisión Valenciana (RTVV) preguntó hoy al Síndic de Greuges, José Cholbi, "por qué no atiende" la queja presentada sobre "manipulación" en el ente. Este sindicato, que junto con CCOO PV e Intersindical Valenciana presentó una queja en este sentido contra el ex director general de RTVV Pedro García, expresó a la institución su decepción ante el "absoluto olvido" al que asegura que les tiene sometidos.
La sección sindical de la UGT recordó en un comunicado que, junto con CCOO e IV, presentaron hace más de un año y medio, el 19 de febrero de 2008, una queja contra la Dirección General de RTVV por manipulación en Canal 9 y Radio 9, que fue acompañada "de abundante documentación, a la vez que se pedía que la Sindicatura de Greuges, con sus medios y tal y como regula la ley, investigara la cuestión y actuara para que acabara la manipulación en la radio y la televisión públicas de los valencianos".
Según UGT, después de que el director general de RTVV envió un informe a la sindicatura, --que recibió las "oportunas alegaciones" de los representantes de los trabajadores--, este órgano "ya no ha hecho nada, o al menos nada ha comunicado a los representantes de los trabajadores", que en enero reclamaron información al síndic, "sin obtener ninguna respuesta, ni siquiera confirmación de haber recibido el escrito".
Por ello, lamentó que "ignorancia absoluta ha sido la única respuesta". El sindicato ha enviado un nuevo escrito al síndic en el que le manifiesta que no entienden cómo puede ser que no les haga "ningún caso, ni que sólo fuera para comunicarnos que no nos da su amparo".
En este caso, esperan "al menos, una respuesta" y que les informe "sobre las gestiones que ha hecho para someter a Canal 9 y Radio 9 a las normas constitucionales relativas a la libertad de expresión, el pluralismo y la veracidad en la información emitida por la entidad pública".
UGT-RTVV estudia si "legalmente" la "falta de respuesta de la sindicatura es una respuesta negativa presunta en los términos legales, para poder dirigirnos a instancias judiciales que nos abrirían la puerta a reclamar ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos". "Es el camino que nos queda si en nuestra casa no nos escuchan", señaló.
