VALNCIA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
Unides Podem pedirá que la Ley de Igualdad LGTBI que plantea el Gobierno de España impida que se juzgue la orientación sexual de las personas.
La presidenta de la Comisión de Igualdad de Les Corts y portavoz en esta materia del grupo parlamentario de Unides Podem, Cristina Cabedo, se ha reunido este miércoles con el valenciano Javier Vilalta, recientemente condenado a indemnizar con 3.000 euros a su exmujer por ocultar su bisexualidad, ha indicado la formación en un comunicado.
Cabedo ha señalado que esta sentencia "vulnera el derecho fundamental a la intimidad, previsto en nuestra Constitución".
En este sentido ha asegurado que "nunca ninguna persona debería verse en la situación de tener que dar explicaciones sobre cuál es su sexualidad en un procedimiento judicial".
A su juicio, "esta sentencia daña la imagen de España, cuando la realidad es que el pueblo español sabe que todas las personas son igual de dignas independientemente de su sexualidad".
Por ello, ha anunciado, "trasladaremos al Ministerio de Igualdad la necesidad de incorporar en el anteproyecto de ley de igualdad de las personas LGTBI en el que ya está trabajando, que ninguna persona tenga que verse juzgada por su orientación sexual", aspecto que planteará al resto de grupos parlamentarios de Les Corts.
En este sentido ha asegurado que "los derechos LGTBI son derechos humanos y aspiramos a que todas las fuerzas democráticas de nuestros parlamentos se unan para consolidarlos".
PROPUESTA CONTRA LA BIFOBIA
Asimismo, ha apuntado que esta legislatura y a instancias de Unides Podem "por primera vez desde que existen Les Corts Valencianes, desde 1982, se ha aprobado una propuesta sobre medidas transversales para combatir la bifobia y se ha hablado de bisexualidad en el Parlamento Valenciano", resolución que ha entregado a Vilalta.
Finalmente ,ha manifestado que "hay quien quiere hacer creer que en tiempos de pandemia, la defensa de derechos como la igualdad de las personas LGTBI pasa a ser algo secundario, cuando la realidad es que no es incompatible porque nunca nadie debiera dejar de renunciar a sus derechos en ninguna situación".
De hecho, ha añadido, "es histórico que grupos que promueven el odio aprovechen situaciones complicadas como la de una pandemia, para debilitar los derechos conseguidos por personas violentadas por su identidad sexual, étnica o de otra índole.
Y eso es algo que los parlamentos, que representamos a todas las personas, y las fuerzas políticas democráticas, no podemos que se unan a la petición".
