Valencia.- Más de 20.000 gaviotas llegan al Parque Natural de La Albufera atraídas por el fangueo del arrozal

Actualizado: martes, 17 enero 2006 21:24

VALENCIA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

Más de 20.000 gaviotas han llegado al Parque Natural de La Albufera atraídas por el fangueo del arrozal, una práctica agrícola que consiste en remover la tierra de los arrozales, una vez vaciado el marjal y con la tierra todavía encharcada, informaron fuentes de la Generalitat.

Se trata de un sistema mecánico para eliminar las malas hierbas, desarrollado por tractores especialmente preparados para esta labor, que saca a la superficie numerosos pequeños invertebrados y anfibios que sirven de alimento a las aves.

La gran abundancia de alimento hace aumentar el número de aves que residen estos días en La Albufera, por lo que la conselleria de Territorio y Vivienda, a través de la dirección de este Parque Natural, estudia la influencia del fangueo en el estado de la avifauna.

El fangueo es una práctica agrícola totalmente compatible con el medio ambiente, ya que las ruedas metálicas, conocidas como gavias que se incorporan al tractor levantan y remueven la tierra, retrasando el crecimiento de hierbas perjudiciales para el arroz.

El conseller de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, explicó que "gracias al fangueo se reduce de forma considerable el uso de herbicidas en el arrozal".

Tras los tractores en pleno trabajo, cientos de Gaviotas Reidoras (Larus ridibundus) Garcillas Bueyeras (Bubulcus ibis) y Garcetas Comunes (Egretta garzetta) se congregan para alimentarse con los muchos invertebrados y anfibios que el paso de la máquina deja al descubierto.

En opinión de Rafael Blasco, "la época del fangueo es una buena oportunidad para que los aficionados a la naturaleza disfruten observando una gran cantidad de aves a poca distancia".

El fangueo no es la única práctica agrícola que influye en el número de aves del Parque Natural de La Albufera. La inundación invernal del arrozal, que se practica entre octubre y finales de enero, multiplica por cuatro la superficie del lago, por lo que según Blasco "ésta es la época preferida por las aves acuáticas invernantes que acuden al Parque".