Nace la tercera y última cría de cebra de la manada de Bioparc, el hermano de Milagritos

Cría de cebra junto a su madre en el parque valenciano
Cría de cebra junto a su madre en el parque valenciano - BIOPARC
Actualizado: viernes, 28 septiembre 2018 7:32

VALÈNCIA, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

Bioparc Valencia ha acogido el nacimiento del tercer y último potro de cebra, el único macho, que ya corretea con sus hermanas, las que nacieron en julio (Bani) y la "famosa" Milagritos, que llego al parque el pasado 5 de septiembre.

Este verano, la manada de cebras ha traído nuevos potros al recinto, tres preciosas crías y una de ellas "conocida internacionalmente". Tras parir dos de las hembras, únicamente faltaba Lucy, que llamaba la atención por su avanzado estado de gestación, relata Bioparc en un comunicado.

Casi en la entrada oficial del otoño, esta cebra parió el pasado jueves 20 de septiembre a un hermoso macho, que ya disfruta de la sabana del complejo junto a sus dos hermanas. La manada de cebras comparte hábitat con rinocerontes, marabús, ibis sagrados y avestruces, y exhibe una escena de naturaleza salvaje.

El grupo está formado por un macho reproductor, Zambé, que llegó a València procedente del safari francés de Peaugres en 2012 y tres hembras que llegaron en 2007: Bom y Lucy, de Copenhagen Zoo (Dinamarca), y La Niña del Zoo de Halle (Alemania).

El 11 de julio, Bom dio luz a una hembra llamada Bani, y La Niña lo hizo casi dos meses después cuando Milagritos llegó al mundo con el emocionante momento de su nacimiento y posterior rescate por parte de sus cuidadores, que la ha hecho conocida. Ahora ha sido el turno de Lucy, que ha parido el único macho.

Dentro de la llamativa manada de cebras, las tres crías siguen a sus madres, mientras que el macho adulto del grupo mantiene su rol protector. Sus franjas blancas sobre fondo negro constituyen patrones únicos que pueden utilizar para reconocerse.

LAS RAYAS LES AYUDAN A SOBREVIVIR

De hecho, una hipótesis recoge que bajo cada franja negra hay una capa de grasa que puede calentarse cerca de 20 grados más que las zonas blancas. Esta diferencia de temperatura a lo largo de su cuerpo genera corrientes de aire que tendrían una función termorreguladora. Los expertos también creen que el laberinto de rayas que constituye el rebaño confunde al depredador y le dificulta la tarea de elegir presa.

Durante este fin de semana, los visitantes de Bioparc tienen la oportunidad de conocer a estas tres crías con la oferta 'BIOdías' a un precio de entrada de '16+1' euros. El parque también ofrece la posibilidad de descontar esos 16 euros de cualquier modalidad de pase 'Anual B!' para adquirirlo el mismo día de la visita, con el incentivo de poder volver durante todo un año.