Andrew Currie sorprende con la comedia de zombies con trasfondo social 'Fido'

Actualizado: jueves, 12 octubre 2006 23:02


SITGES (BARCELONA), 12 Oct. (EUROPA PRESS) -

El director Andrew Currie recupera en la comedia de zombies 'Fido' el terror gamberro de los años 50 en una película protagonizada por Carrie-Anne Moss, Bill Conolly y Dylan Baker, en la que no se ahorra una crítica a la sociedad norteamericana y la obsesión por la seguridad.

Encuadrada dentro de la Sección Oficial Fantastic del Festival de Cine de Sitges, 'Fido' traslada a un tranquilo pueblecito de la América de los 50 donde los zombies que habían aparecido a consecuencia de una nube tóxica, son domesticados gracias a un collar y convertidos en seres útiles para la sociedad.

Andrew Currie explicó hoy, en rueda de prensa, que la película es una "crítica" a la sociedad americana y recordó que el primer guión lo escribió hacia 1994, aunque luego lo guardó. Tras los hechos del 11-S y la posterior política preventiva de la Administración Bush, el director decidió rescatarlo para satirizar el "cambio de política hacia los inmigrantes".

Estos zombies domesticados sirven a Currie como metáfora del uso que hacen del miedo los gobiernos de todo el mundo "para controlar a la población". El director subrayó que decidió situar la acción de la película en los años 50 para mostrar "un paisaje idílico" tras la guerra mundial, en un lugar pintoresco como la ficticia ciudad de Willard.

En la película se combinan los momentos dramáticos con los humorísticos, un equilibrio que Currie en todo momento ha querido mantener. El director, gran amante de los cómics, confesó que nunca vio 'Fido' como "una película de terror" y señaló que si "se dan hechos dramáticos son para enfatizar los momentos satíricos. Yuxtaponer el miedo con el sentido del humor".

Por otro lado, en la jornada de hoy del Festival de Cine de Sitges también se ha podido ver, dentro de la sección Catalan Focus, la obra póstuma del director Joaquim Jordà, 'Más allá del espejo', que retrata la agnosia y la alexia, dos enfermedades cerebrales que comportan alteraciones sustanciales en la percepción.