Jordi Solé invita a reflexionar sobre la precariedad en el mundo globalizado en su película 'El taxista ful'

Actualizado: miércoles, 14 junio 2006 20:30


MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

El director barcelonés Jordi Solé invita al espectador a reflexionar sobre la precariedad en el mundo globalizado en su película 'El taxista ful', que se estrena el próximo viernes en los cines. Su segundo largometraje, un falso documental más cercano al "vídeo activismo", narrado a través de los ojos un taxista que conduce coches robados, está protagonizado por el debutante Pepe Rovira.

Al descubrir el caso real de José R., quien robaba coches en Barcelona para trabajar como taxista, Solé se dio cuenta de que la historia encajaba para utilizarla en este filme, en el que habla de la precariedad, "entendida como ese límite que nos impide vivir". Pese a no querer contar la historia de este individuo, Solé lo ha utilizado de hilo conductor para hablar del paro, no como algo transitorio sino como algo que "no tiene solución".

Solé quiso reflexionar sobre el sentimiento de culpabilidad por no llegar a ser o por no ser capaces de tener. "El trabajo nos da la identidad y nos hace vivir en competencia más que en armonía", subrayó Solé, autor de los cortometrajes '0,7 ya!', del telefilme 'Renda Antiga' y del largo 'Tatawo'.

"Quise reflexionar sobre las soledades impulsadas por la desesperada competencia entre iguales, sobre la tristeza que nos envuelve y que se ha apoderado por completo de nuestras vidas sin que, de momento, hayamos sabido reaccionar", destacó.

UN DISCURSO MÁS QUE ENTRETENER

El realizador reconoció que en otras películas ya se ha analizado el fenómeno de la precariedad. "Quería desarrollar un discurso más que entretener", dijo sobre un filme que habla de "la tragedia" de un señor de 52 años que no tiene trabajo "y tampoco una solución posible".

"La películas es muy real", destacó, por su parte, el actor Pepe Rovira de la que es su primera experiencia frente a la cámara. "Habla de la vida de personas reales: unos politizados y otros no, pero donde la precariedad es una constante", dijo, subrayando que el filme "invita a rebelarse y a solucionar el mundo en que vivimos".

"Decimos no a la guerra, no a la OTAN... Pero luego es que sí. Parece que no hay una garantía y no actuamos de forma efectiva. La época de las reivindicaciones está agotada", concluyó.