BILBAO, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, anunció hoy que el Ayuntamiento recurrirá en casación ante el Tribunal Supremo la sentencia por la que se condena al Consistorio y a las promotoras a pagar una indemnización de 30.000 euros a Santiago Calatrava por "alterar" su obra del puente Zubi-Zuri, al añadir una pasarela para facilitar el acceso a las Torres Isozaki.
El primer edil aseguró que, en su momento, aceptó "el coscorrón" que dio, en su momento, el titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao, Edmundo Rodríguez Achútegui, cuando afirmó en su resolución que el Ayuntamiento tenía que "haber informado al señor Calatrava" de las modificaciones realizadas y señaló que sigue "aceptandolo".
No obstante, precisó que no está de acuerdo con los argumentos jurídicos de la resolución de la Audiencia vizcaína que, a su juicio, son "muy pro-arquitecto", aunque se mostró "contento" por tener que indemnizar a Santiago Calatrava con 30.000 euros -de los que 10.000 corresponderán al Ayuntamiento- y que no se contemple la posibilidad de "tirar el puente, que sería una barbaridad" o la de pagar los tres millones de euros que exigía el arquitecto, algo que "sería absolutamente desproporcionado".
El alcalde aseguró que el Consistorio "no está de acuerdo con el fondo de la sentencia", porque es "absolutamente a favor del arquitecto", y afirmó que su pretensión es recurrir en casación, para lo que tienen un plazo de cinco día.
INTERÉS PÚBLICO Y FUNCIONALIDAD
Iñaki Azkuna dijo que la sentencia de la Audiencia vizcaína, además, "no resuelve un problema" porque, si la promotora "hubiese dado al señor Calatrava la prolongación del puente", hubiera existido "el mismo problema con Arata Isozaki, porque tan importante es un arquitecto como otro". Según indicó, Calatrava "ha arreglado el aeropuerto" después de que la Ministra de Fomento, Magdalena Álvarez dijera que "la zona de llegadas de Calatrava era magnífica para el Caribe, no para Loiu".
A juicio del Consistorio, la sentencia no hace una "verdadera ponderación" del derecho del "propietario del soporte, el Ayuntamiento de Bilbao y el derecho a la integridad de la obra del autor", teniendo en cuenta las "circunstancias concurrentes de planeamiento urbanístico y del interés público y la funcionalidad de la obra".