Caballero Bonald reivindica la "utopía" de la razón en un mundo de "menosprecios a los derechos humanos"

Actualizado: lunes, 8 mayo 2006 23:00


SANTANDER, 8 May. (EUROPA PRESS) -

El escritor gaditano José Manuel Caballero Bonald reivindicó hoy la "utopía" de la razón en un mundo "como el que hoy compartimos, asediado de violencias y tribulaciones, de guerras inicuas y menosprecios a los derechos humanos". Así lo destacó durante el acto de entrega del Premio Nacional 2005 de las Letras Españolas, que presidió la ministra de Cultura, Carmen Calvo, en el Paraninfo del Palacio de La Magdalena de Santander.

El autor de 'Las adivinaciones' apeló a "los viejos métodos humanísticos de la razón" y al poder de la utopía como "una esperanza consecutivamente aplazada", labor en que "la Literatura también es un buen sistema para defendernos de todo lo que nos impide ser más libres y más felices".

El galardonado escritor defendió su "perseverancia" de sesenta años en el mundo de las Letras, proceso en que ha reproducido sus "ideas estéticas" pero también su "pensamiento moral", su "manera de intervenir en la historia", poniendo implícito "todo lo que yo pienso y hasta lo que todavía no pienso".

Por su parte, la ministra hizo alusión durante su discurso a las "grandes figuras" de las Letras cántabras, "una pléyade de escritores cántabros insignes que han dado páginas importantísimas de nuestra literatura" y "sin los cuales nuestras Letras españolas no serían las que son".

Precisamente, la entrega de los premios Nacionales de Literatura 2005 estuvo dedicado a la memoria de la santanderina Concha Espina en el Cincuentenario de su fallecimiento, figura que glosó tanto la ministra, como el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro.

Calvo aseguró que "ya desde el siglo XV la montaña santanderina ha aportado autores de coplas y romances", como Antonio Ruiz de Santillana, pasando por el ilustrado Rafael de Floranes, y más, recientemente, "el gran novelista José María de Pereda" el arqueólogo Marcelino Sanz de Sautoula, y "sobre todo, la inmensa figura del máximo erudito y polígrafo español, don Marcelino Menéndez y Pelayo".

ESPAÑA, POTENCIA EDITORA PERO NO EN LECTORES

La ministra de Cultura destacó la importancia de España como "potencia editora", si bien "no lo es tanto en la cantidad de personas que acceden a la lectura", apostando por conseguir el logro de "una sociedad lectora, que sea más libre".

De Caballero Bonald, la ministra destacó la "calidad de su obra", unida "a una defensa sincera y comprometida de la libertad creativa y política", de quien "valdría decir que no ha vendido su alma a ninguna idea en exclusiva".

Todos los premiados, excepto los fallecidos Alberto Méndez y Alberto Miralles, -que fueron su hijo y su viuda, respectivamente, quienes recogieron la distinción- estuvieron presentes en el escenario del Paraninfo del Palacio de La Magdalena.

Así, en lo que respecta a las cuatro modalidades literarias, José Corredor Matheos recogió el premio en el ámbito de Poesía, por su obra 'El don de la ignorancia'. Mientras tanto, el galardón en Narrativa fue para Alberto Méndez Borra, por 'Los girasoles ciegos'; en Ensayo el premiado fue José Luis Pardo Torío, por 'La regla del juego'; y en Literatura Dramática la distinción ha sido para Alberto Miralles Grancha, por su obra 'Metempsicosis'.

Por otro lado, en la categoría de Historia de España el premio ha recaído en Santos Juliá Díaz, por su trabajo 'Historia de las dos Españas'; y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil lo recibió Antonio Rodríguez Almodóvar, por 'El bosque de los sueños'.

En el campo de la traducción, en esta edición se ha galardonado a Luisa Fernanda Garrido Ramos, por su trabajo con la obra 'El kapo', de Aleksandar Tisma; y el premio en la modalidad de Obra de un Traductor ha sido para Francisco Rodríguez Adrados.

Finalmente, el premio a la Mejor Labor Editorial Cultural lo recogió 'Sígueme, S.A. Ediciones' y el de Fomento de Lectura para 'Cuadernos de literatura infantil y juvenil' y para 'Leer juntos', un programa de educación literaria y promoción de la lectura.

CANTABRIA, LA MAYOR DE LAS REALIDADES NACIONALES

Por su parte, el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, aludió a Concha Espina, José María de Pereda, y el Beatro de Liébana como "tres de los más altos exponentes de los valores y las tradiciones culturales que constituyen el patrimonio histórico sobre el que se cimienta la identidad de Cantabria, tres testimonios de la mayor grandeza que atesora esta tierra: sus gentes, hombres y mujeres orgullosos de su personalidad".

En este sentido, Revilla indicó que "ahora que parece iniciarse una carrera de obstáculos por definirse como realidad nacional, Cantabria es la mayor de las realidades nacionales", ya que "aquí está el origen de esa cosa extraordinaria y maravillosa que es España".

Como hizo antes la ministra, Revilla también dedicó unas palabras a la celebración del Año Jubilar Lebaniego y a la importancia del Beato de Liébana, "uno de los hombres más influyentes de su tiempo".

En la mesa presidencial del acto también estuvieron presentes, aparte de los ya mencionados, el delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez; el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Francisco Javier López Marcano, y la vicepresidenta regional, Dolores Gorostiaga.