El Museo Lázaro Galdiano alberga una pintura de Zurbarán cedida por el Ayuntamiento de Sevilla hasta el 24 de junio

Foto Fray Pedro de Oña
MUSEO LÁZARO GALDIANO
Publicado: miércoles, 14 febrero 2018 19:02

MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Museo Lázaro Galdiano de Madrid acogerá, desde este jueves 15 de febrero hasta el próximo 24 de junio el cuadro 'Fray Pedro de Oña' (1629-1631) de Francisco de Zurbarán, adquirido por el Ayuntamiento de Sevilla en 1950 y depositado en el Centro Velázquez de la Fundación Focus, según ha informado la institución.

Oña fue catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela entre 1591 y 1594, años en los que redactó su comentario a la 'Física de Aristóteles' que publicó en Alcalá de Henares, ciudad en la que había escrito e impreso su tratado sobre la 'Lógica' (1588).

La pintura, restaurada en 2010, fue descubierta en 1950 por el marqués de Lozoya en el convento de las hermanas mercedarias de Sevilla, a donde había llegado hacia 1836 tras la desamortización del convento de la Merced, y adscrito al catálogo de Zurbarán por Diego Angulo.

"La obra reúne de modo ejemplar las notas estilísticas que definen la pintura del maestro extremeño: un carácter escultórico de la figura, acentuado por un marcado claroscuro, y un magistral tratamiento de las telas, en una representación escueta a la vez que imponente", ha explicado la conservadora Carmen Espinosa.

El retrato pertenece además a la serie de teólogos y predicadores mercedarios encargada a Zurbarán en 1628 para la Biblioteca del Convento de la Merced, de la que también forman parte, entre otros, los retratos del doctor en Artes y gran teólogo, filósofo y matemático, fray Pedro Machado, del predicador fray Hernando de Santiago, del vicario general de la Orden y profesor de Teología y Filosofía en la Universidad de Valencia, fray Jerónimo Pérez y del doctor en Artes y consejero de los reyes Felipe II y Felipe III, fray Francisco Zumel.

Según el estudioso de la obra y asesor científico durante el proceso de restauración, Benito Navarrete Prieto, la llegada de esta obra es una ocasión "muy especial" para que el público que visite el Museo Lázaro Galdiano descubra uno de los mejores retratos de Zurbarán "realizado con sombrosa simplicidad y al mismo tiempo con gran riqueza de matices".